La veterana banda liderada por Øystein Garnes Brun regresa tras cinco años de silencio con Fall, un disco que, si bien no llega a la altura del magnífico True North de 2019, nos sigue abriendo camino hacía un mundo más mágico.
Borknagar cuentan con ya casi tres décadas de actividad en las que la inestabilidad en cuanto a la formación va inversamente proporcional a la calidad de su obra. Resulta algo curioso que Øystein sepa reconducir de una forma tan sublime la banda y su trabajo final teniendo en cuenta que es el único miembro fijo. Y aunque en Fall repite formación, algo inédito, el disco no conecta completamente con lo que nos ofrecieron hace un lustro. El folk nórdico cada vez es más importante en el sonido de la banda, así como el black metal primigenio, menos relevante. También empiezan a filtrear con el metal de corte vikingo.
En Fall nos topamos con voces potentes y limpias adornadas con épicos coros, con densos riffs secundados por una batería galopante, así como el uso de instrumentos tradicionales nórdicos dotando de épica cada composición a las que sumamos los formidables teclados. Unos elementos folk que enriquecen las canciones llenándolas de matices.
Los noruegos logran crear esa atmósfera fría y triste que tanto les caracteriza, pero haciendo prevaler la sensación de triunfo final tan acorde al subgénero que están abrazando. Otro aspecto destacable es que si a menudo habían caído en la auto contemplación y el excesivo minutaje, aquí consiguen que cada pieza tenga la duración perfecta para no aburrir.
Cuatro representaciones de lo que comprende el disco: el inicio tan blacker con ‘Summits’ con sensaciones extremas que se van diseminando a medida que avanza la canción, deriva en una oda al viking metal de corte progresivo. Temazo lo cojas por donde lo cojas. Canciones en las que las atmósferas cobran vida como ‘Nordic Anthem’ o ‘Afar’. Y en contrapartida chocamos de bruces con el black metal sinfónico en ‘Moon’.
Posiblemente Fall sea su disco menos extremo y más épico, no tan despampanante como el anterior, pero otro gran trabajo a sumar a su catálogo.
BETO LAGARDA
