Aunque cuando uno es fan de Cheap Trick lo es de por vida, es difícil no pensar que la inspiración hace tiempo que no les visita. Si bien hay un sector de seguidores que valora muy positivamente sus últimos discos, a mí hace la tira que ninguno de ellos logra levantarme de la silla, y, aunque no sé por qué esta vez tenía la corazonada de que sí, In Another World no ha sido la excepción.
Que conste que tiene mérito que después de casi 50 años de carrera sigan teniendo el ánimo para seguir componiendo y grabando, pero la impresión es que, si se me permite el chiste, a Cheap Trick se les acabaron los trucos. Robin Zander sigue conservando intacta su magnífica voz, y las guitarras de Rick Nielsen suenan mucho más auténticas que lo hacían en su etapa pseudo AOR de los 80, pero las falta lo más importante: canciones. Que la mejor sea la versión de ‘Gimme Some Truth’ de John Lennon, lo dice todo.
A lo sumo ‘Light Up The Fire’, lo más cercano que han sonado a sus amigos AC/DC, la balada ‘Another World’, y la power popera ‘Here’s Looking To You’ pasan el corte. Pero de unos tipos que en los 70 parecía que habían encontrado el secreto para parir temazos sin parar (‘Surrender’, ‘Downed’, ‘Come On Come On’, ‘Dream Police’, ‘On Top Of The World’, ‘Voices’… la lista es larguísima) habría que esperar algo más que el blues insulso de ‘Final Days’, o los enésimos refritos de los Beatles, como ‘Quit Waking Up’ o ‘So It Goes’.
A ver, no es un disco que vaya ofender a nadie por malo o por pervertir su espíritu (no es Just Push Play de Aerosmith), pero los temas van pasando sin que una sola melodía se te quede en la cabeza, ¿y no es eso justo lo que buscamos cuando escuchamos a Cheap Trick? Pues eso.
JORDI MEYA