FECHA: 8 DE FEBRERO DE 2025
LUGAR: LENNON’S CLUB (L’HOSPITALET DE LLOBREGAT)
PROMOTOR: MANGUALES EXTREME METAL UNION
El Lennon’s Club se quedó pequeño, muy pequeño para el retorno de Absu a la capital catalana. Bueno, de Proscriptor McGovern tocando con miembros de Zemial… aunque tampoco nos pongamos quisquillosos, porque el baile de músicos en la influyente banda estadounidense ha sido una constante en todas sus eras, y encima, éstos venían con el 30 aniversario del reverenciado The Sun of Tiphareth bajo el brazo. Normal que finalmente se petara ese sótano…
Con un público ya notorio ante ellos, ReDimoni despacharon su clásica tralla thrash repartiendo a diestro y siniestro con temas nuevos y antiguos. ‘The Abyss’, ‘Straight To Hell’ o ‘Irongoat’ convivieron perfectamente con ‘Gog Et Magog’, ‘Rapture’, ‘Ancient Buried Secrets’ o ‘Axes’ de sus recientes EPs, pero no les vimos tan sueltos como en otras ocasiones dadas las reducidas dimensiones del escenario. Fueron a por la faena sin algunos de sus elementos más teatrales, y como Ered, su sonido no acabó de reventar del todo limpio.
Desde finales de los 90 en activo, Shogoth y compañía tampoco necesitan presentaciones dentro del meollo barcelonés. Van rápidos, muy rápidos, y Abyssal al bajo y voz pone toda la actitud necesaria para que no pierdas detalle. De igual forma, tengo que confesar que me perdí dos, puede que hasta tres canciones suyas intentando que me atendieran en la barra. Tal fue el nivel de saturación en el Lennon’s esa noche… Les pido disculpas. Ya tendremos otras ocasiones.
Lo primero que llama claramente la atención de esta nueva encarnación de Absu es ver a Proscriptor McGovern ‘liberado’ de la batería y ejerciendo el papel de frontman entre sus colegas griegos. Con su camisa de hechicero oscuro y un micro personalizado a lo King Diamond, lo pasó en grande interpretando The Sun Of Tiphareth, uno de sus discos más aplaudidos, junto a unos secuaces solventes, que sorprendieron tocando esas canciones con naturalidad, e incluso autoridad.
Cómo Proscriptor presentó los temas, con esos siseos malévolos, también moló mucho.
Una vez más, sobre lo que escupían los altavoces hubo quejas. Por mi parte, justo donde estaba situado, tengo que decir que Absu sonaron totalmente a Absu. Por el contrario, me perdí casi la totalidad de la actuación de uno de los dos bestiajos encargados de los mástiles. La acumulación de gente y las columnas me impedían la visión, qué le vamos a hacer…
Show generoso, por encima de mis expectativas, y con guiños también a Zemial, aunque muchos se preguntaron cuánto hubiera crecido el bolo en un recinto más grande y preparado.
PAU NAVARRA
