FECHA: 24/09/2024
LUGAR: MANCHESTER ACADEMY (MANCHESTER, INGLATERRA)
PROMOTOR: LIVE NATION

Que los Sex Pistols hayan decidido salir de nuevo a la carretera sin Johnny Rotten puede parecer una herejía para algunos. También es cierto que el umbral de sorpresa de todos nosotros en lo que respecta a reuniones, retornos o simplemente como ciertas bandas siguen adelante, ya es muy bajo. Así que llegados a este punto ¿por qué Sex Pistols no pueden volver tocar con un cantante al que casi doblan en edad como sustituto? Cosas mucho más raras han visto nuestros ojos y, no nos engañemos, quien tuviera la idea de llamar a Frank Carter coma vocalista, merece el premio a idea del año.

Puede que haya vocalistas que encajen mejor en el papel de Rotten, pero cuesta pensar en uno como Carter que, por un lado, mantiene todavía esa energía desbordante que le hizo famoso desde sus días en Gallows, pero al mismo tiempo ya tiene la experiencia necesaria para cargarse a sus espaldas un nombre tan sagrado como el de Sex Pistols.

Que el proyecto naciera con la única idea de hacer tres conciertos para salvar el Bush Hall, un club de Londres agobiado, como tantas otras salas, por sus deudas habla de la buena voluntad de esta unión. Sin embargo, dudo que el momento en que los cuatro se juntaron e hicieron su primeros ensayos pensaran que la cosa se iba a quedar simplemente ahí. Y más cuando las críticas de esos primeros conciertos fueron fantásticas en su mayoría, convenciendo a los más escépticos. ¿Y que podemos decir de nuestros tres caballeros? A buen seguro que tanto Steve Jones (guitarra), Paul Cook (batería) y Glen Matlock (bajo) vieron la oportunidad que estaban esperando durante todos estos años.

No es ningún secreto que su relación con Lyndon ha ido de mal en peor en los últimos años, hasta llegar a un punto de no retorno, lo cual ha provocado que cualquier reunión de la banda original sea implanteable. No seré yo quien ponga en duda la importancia capital de Johnny Rotten en la historia del grupo pero es cierto que el drama siempre le acompaña en todo lo que hace, y más con todo lo relacionado con los Pistols. Dicho de otra manera, Sex Pistols son una mejor banda de rock’n’roll de la que se les ha reconocido; la propia leyenda de la banda ha oscurecido su méritos musicales. Jones, Cook y Matlock son, al fin y al cabo, tres rockers que todo lo que quieren es salir a tocar y que han tenido que sentirse frustrados teniendo semejante catálogo de canciones en barbecho durante tantos años. Hasta ahora que ha llegado su momento.

Tras las buenas sensaciones dejadas en los conciertos en Bush Hall, se anunció una pequeña gira inglesa de cinco fechas en locales de 2500-3000 personas para la cual se agotaron todas entradas en el mismo día de ponerse a la venta. No es la reunión de Oasis,  pero el interés está ahí.

El de Manchester era la cuarta de esa gira y todo lo que llegaba de los conciertos anteriores no eran más que buenas palabras. Por ello no es de extrañar que a la que salieron a escena sin ninguna parafernalia, y pusieron la quinta marcha, empezando con ‘Holidays In The Sun’, todo fuesen sonrisas en el escenario e histeria colectiva en la pista. Solo hicieron falta un par de temas más, ‘Seventeen’ y New York’, para saber que sí, que esto funciona, y que a veces las ideas locas pueden triunfar.

Se nota que las buenas críticas les han hecho ganar confianza a los cuatro y parecen más una banda que llevan años tocando juntos que una que no ha dado ni una decena de conciertos. Frank Carter lleva todo el peso escénico y a los otros tres, tocando mejor que nunca, ¿cuándo se va a reivindicar finalmente a Steve Jones como uno de los grandes guitarras de la historia?, ya les va bien que la atención recaiga en el pelirrojo. Viendo a Carter cantar entre el público un ‘Pretty Vacant’ épico o ‘Bodies’ en medio de un circle pit, no parece que le importe mucho ser el punto focal.

El repertorio deja poco espacio para la decepción. Sonó todo Never Mind The Bollocks, de hecho ese era el reclamo de la gira, más algunas delicatessen como ‘Satellite’, ‘No Fun’ o ‘Silly Thing’ y claro, si nos ponemos puñeteros podemos echar en cara que se dejaran algunas otras joyas como ‘Did You No Wrong’, que sí tocaron en Bush Hall o ‘Lonely Boy’, o que hubiese sido mucho más molón escuchar ‘The Great Rock N’ Roll Swindle’ en vez de la versión de ‘My Way’, que para un servidor su inclusión estuvo cogida con pinzas, aunque el publico la cantó como si le fuese la vida en ello. Detalles sin importancia porque lo importante de verdad es que cuando el concierto acabó con ‘Anarchy In The U.K.’, imaginad el momento, tuve la sensación de haber visto un concierto que había superado mis expectativas, que ya eran altas de por sí, y de haber sido obsequiado con un regalo que no esperaba tener a estas alturas.

Insisto en que me sorprendería mucho que esto se quede aquí y la banda no este girando este verano en toda clase de festivales. Si pasan cerca de tu casa, ni si te ocurra perdértelos.

RICHARD ROYUELA