FECHA: 1 DE MARZO DE 2025
LUGAR: SALA COPÉRNICO (MADRID)
PROMOTOR: MADNESS LIVE!
Con los dobles carteles pasa lo mismo que en las bodas. Puede que vengas por parte de la novia o del novio, pero lo importante es estar presente y pasarlo bien. Más o menos eso fue lo que vivimos la noche del pasado sábado en Madrid con la gira conjunta que encabezaban Green Lung y Unto Others, dos de las alineaciones más interesantes del panorama metálico, ambas con posibilidades de subir algún que otro peldaño en el futuro próximo si continúan dando los pasos correctos.
Como invitados a la fiesta contaron con Satan’s Satyrs, quienes vinieron a añadir mayor diversidad si cabe a la cita. Lo de los de Virginia es una suerte de proto-hard-punk donde la actitud prima más que la técnica. Títulos como ‘Black Souls’ y ‘Show Me Your Skull’ encajaron dentro de la temática oscura que presentaba la velada, aunque con un toque menos serio. De hecho, hasta podríamos interpretar el look glam de su líder Clayton Burgess como un homenaje indirecto a David Johansen de New York Dolls, de quien conocimos la noticia de su fallecimiento pocas horas antes de entrar en la Copérnico.
Reconozco que no estaba del todo familiarizado con la música de Unto Others, aunque ya había leído sobre ellos con motivo de su reciente Never, Neverland. Lo que no esperaba es que contaran con tantos fans entre la hinchada ni que su propuesta mostrara influencias tan variadas. Y es que en la batidora de los anteriormente conocidos como Idle Hands entran desde Type O Negative, Misfits, The Cure o los últimos Tribulation si me apuran. Como si Robert Smith se hubiera montado una banda de heavy, para que se hagan ustedes a la idea.
Es verdad que viendo su aspecto, un podría pensar que tienen un punto hasta paródico de lo que es el rock gótico. Era bastante gracioso ver al guitarrista Sebastian Silva recorrer incansable el escenario de un lado a otro mientras posaba para las primeras filas. Pero a la que uno ve como el personal corea desde la primera a la última canciones como ‘Butterfly’, ‘Momma Likes The Door Closed’, ‘Nightfall’ o ‘Suicide Today’, se da cuenta de lo que suyo va muy en serio. Repasaron a fondo todo su catálogo e incluso acertaron con una ‘Pet Sematary’ de los Ramones muy bien traída. Cerraron con una potente ‘Give Me To The Night’, dejando así un buen sabor de boca para lo que vendría poco después.
No debimos ser pocos quienes descubrimos a Green Lung abriendo para Clutch en su gira de 2022. Aquella noche quedamos hechizados por su embrujo y esperábamos que llegara el día para poder verles en una sala. Pues bien, tras ver el aquelarre que acometieron (no faltó toda la simbología escénica con máscaras y referencias al ocultismo) no me cabe duda de que su siguiente visita debería ser dentro de un aforo más amplio. Fue salir tras una ceremoniosa introducción a golpe de trompetas y remitirnos toda una invitación a unirse a sus ‘Woodland Rites’.
Es verdad que los londinenses tiran de todos los clichés de un género tan sobado como el doom de temática satánica o demoniaca. OK, de acuerdo. ¡Pero es que esos son los clichés que nos gustan! Sin duda es una banda diseñada a medida para encandilar al tipo de público que acude cada año a citas ineludibles en el calendario como Desertfest, Sonic Blast Moledo o nuestro Kristonfest. Todo está cuidadísimo al detalle. Desde las canciones, las estética y hasta un puesto de merchandising bien molón. Pero es que los tíos saben llevar perfectamente la teoría a la práctica.
Encabezados por un Tom Templar sobradísimo en las tareas vocales, el quinteto ejecutó enterito su último y esplendido This Heathen Land a un volumen ridiculamente alto. ‘Mountain Throne’, ‘The Ancient Ways’, ‘Hunters In The Sky’ y ‘Forest Church’ fueron cayendo como puñetazos sonoros a golpe de riffazos parte nucas. Ahí tiene mucho que decir un hacha como Scott Black, quien devoró el mástil de su SG en cada solo que se le puso a tiro. Aún así, hubo momentos especialmente destacables como la vampírica ‘Oceans Of Time’, el folk tribal de ‘Song Of The Stones’ y ese pedazo de single que podría enganchar a cualquier seguidor de Ghost llamado ‘Maxine (Witch Queen)’, dedicado a todas las brujas entre el público.
Con otro medio tiempo impepinable como ‘Graveyard Sun’ (al contrario que otras bandas de la escena, Green Lung saben como escribir canciones redondas), abandonaban la escena del crimen, regresando minutos más tarde dispuestos a rematar la faena. Parecía que la dupla ganadora de ‘Old Gods’ y ‘Let The Devil In’ sería más que suficiente para ponerle el broche a un setlist perfecto, pero se guardaron una desgarradora ‘One For Sorrow’ para darle carpetazo al asunto. Un cántico a la lucha contra la depresión que evidenció que, a pesar de que su letras versan sobre un mundo de fantasía, no pierden de vista lo que ocurre en la realidad del día a día. Tan real como que están destinados a grandes hazañas.
GONZALO PUEBLA
