FECHA: 29 DE JUNIO A 3 DE JULIO
LUGAR: RECINTO RESURRECTION (VIVEIRO)
PROMOTOR: RESURRECTION FEST

Después del parón pandémico llegaba el reencuentro con mi festival favorito. El planteamiento de fechas no era del todo compatible las obligaciones laborales, así que no hubo más remedio que perderse la jornada del miércoles y el jueves y perderse bandas como Deftones (sobre su bolo me dieron opiniones para todos los gustos) o Judas Priest (de quiénes podéis leer en la crónica del Barcelona Rock Fest). También es cierto que cinco días de festival resultan muy complejos de gestionar a menos que estés de vacaciones. Lo bueno si breve, dos veces bueno. A mi que no haya pepinos rollo Maiden, Kiss, Metallica… me da igual, de hecho, en el caso del Resu lo prefiero. Quiero descubrir bandas, ver grupos que difícilmente vengan de gira a España, disfrutar de artistas que no gozan de tanto renombre. Por otro lado, os pido disculpas por adelantado si no menciono a todas las bandas pero uno no llega a todo.

No voy a ahondar mucho en el tema cancelaciones, cambios de bandas y demás. Los promotores hacen lo que pueden y creo que las bandas deberían hacer una reflexión. Entiendo la situación del COVID y los hándicaps de movilidad pero, bajo mi punto de vista, se está abusando de las cancelaciones.

Avión en hora, ánimos a tope, Big Mac a las siete de la mañana… nada puede salir mal. Nos vamos directos a degustar el marisco y la carne de la zona (verdaderos cabezas de cartel del festival) y con las energías a tope… al Resu.

VIERNES 1
Tocado por la cancelación de Employed To Serve (que ganas les tenía) empezamos la jornada con el directo de Caliban. Recuerdo ver a la peña flipar con ellos en la edición de 2014 y a mi no gustarme especialmente, justamente todo lo contrario a lo que me pasó en esta ocasión. Los vi curtidos, frescos y mucho más maduros que en la otra visita. Su comunión con el público fue mágica y todo lo que hicieron encima del escenario me supo a gloria, incluso su innecesaria cover de ‘Sonne’ de Rammstein. Y viendo a los alemanes recordé por qué el Resu es el mejor festival de rock de nuestro país: el público y sus trabajadores de seguridad. El público del Resu es genial. Gente joven con ganas de pasarlo bien haga sol o llueva, sonrisas, abrazos, ayudas en el moshpit… ganas de vivir. Lo del equipo de seguridad es de otro planeta. Están todo el festival para ayudarte, no para llamarte la atención. Recogen en brazos uno por uno a todos los chavales que se lanzan a hacer crowdsurf. Es tan simple y tan bonito.

Foto Caliban: Alex Belza

Paseíto para ver los cambios en el festi. Lo del lavabo extra, guay. Ahora solo nos queda hacerlos todos un poco más grandes. Que la carpa y el Desert se hayan intercambiado tampoco me parece mal. ¿La carpa es más cortita ahora o necesito gafas? El market quizás ocupaba demasiado espacio y no se echa mucho de menos. Vamos… todo bien. Los precios… paremos el cambio euro-tokens ahí que nos estamos pasando. Por lo demás, contento con las novedades.

Sigamos. Jinjer, que pena, no hay manera de conectar con ellos. Que lo hacen de categoría pero la mezcla voz gutural-lírica y ese guiño a Messuggah no me va. Dejando gustos de lado los ucranianos lo dieron todo. Técnicos lo son un rato y estaba claro que iban a sentir el apoyo del público en un momento tan difícil para su país. Hablando de técnicos, no veas el crack de sonido. Sonó de lujo todo el concierto.

Foto Jinjer: Alex Belza

Aprovecho para ir a echar un ojo a Aphonnic y quedarme sordo. Menudo sonidazo… excesivo. Jugaban en casa y el público estaba por la labor. Sus fans son muy fans y lo gozaron como el que más. Siempre mola cantar a grito pelado los temas de tu banda fetiche, rollo ultra en el campo de fútbol.

Había que bajar tensión y me decidí por El Altar del Holocausto. A ver… que yo pensaba que con esos atuendos me iban a dar miedo y se mueven más que el precio de la gasolina. Me los imaginaba más estáticos y me dejaron descolocado. Una vez en faena nada que objetar musicalmente hablando. Muy a favor de que se programen bandas instrumentales en el festi.

Soy muy fan de Rise Against. Mentira… era muy fan de Rise Against, hasta que los vi por primera vez en concierto. La intensidad de sus discos se pierde totalmente en sus directos. Es una pena enorme. Es como si no se lo estuvieran pasando bien, como si estuvieran allí castigados. Además no supieron sacarle todo el provecho a su escenografía, que se quedó algo pobre. A su favor decir que esta vez estuvieron mucho mejor que las dos anteriores veces en las que los vi en sala. He llegado a la conclusión que Tim es así, no tiene un mal día ni se encuentra mal… es tal cual. Pero claro… el público del Resu, no olvidemos donde estamos. Con esa respuesta por parte del respetable hasta la banda más torpe se crece. Buen setlist: ‘Satellite’, ‘Ready To Fall’, ‘Re-Education’, ‘Savior’… si temazos tienen para parar un tren. ¿Cómo no tocáis ‘Injection’? Otra cosa imperdonable, ese tema es de los mejores de la historia del punk rock.

Foto Rise Against: Alex Belza

Ahora viene el problema. Descubrí hace poco a Hangman’s Chair, que han llegado al festi rebotados, y me los ponen con Celeste. Menudo solape. El último disco de Hangman´s Chair es un pepino pero casi a las doce de la noche y tocando Celeste… pues eso, que solo vi dos temas. Y lo que vi me gustó mucho. En cuanto a los franceses, brutales. Sin duda alguna una revelación de banda a la que he descubierto también con su último trabajo (más vale tarde que nunca). Que no han descubierto la penicilina pero es que tampoco hace falta innovar musicalmente para fliparlo. Su mezcla entre black metal y post-hardcore es una delicia. Estos al revés que muchas bandas grandes con cuatro luces, unos frontales y un sonidazo excepcional ya tienen suficiente para dejar el pabellón bien alto.

Sabaton. No entiendo lo de esta banda. Tres veces los he visto ya en directo y no se por dónde cogerlos. Que sí, que los fuegos artificiales molan pero para eso me voy a la Mascletá. Por mucho que intento sacarles algo bueno, me cuesta. Lo que es innegable es que tienen muchos fans, así que, todo para ellos. Me piro a Lionheart. Fuck, lo retrasan a las 2:30. Mátame camión… quiero ver a Decapitated. Otra gran noche junto a Sabaton.

Foto Sabaton: Alex Belza

La espera valió la pena. Decapitated sonaron de lujo ofreciendo un bolo de locos. Cuidado, que el escenario Ritual del Resu es el mejor sitio del país para escuchar a bandas del género. Jamás he oído nada mejor secuenciado que los bolos de Brujeria, Watain, Carcass, Entombed… allí le han cogido el gusto y suena de miedo. Los polacos son técnicos de manual y supieron sacarle el 100% a ese sonido ofreciendo un despliegue de otro planeta. Bandaza. Y con casi 24 horas sin dormir, nos vamos a coger fuerzas para la siguiente jornada.

SÁBADO 2
Nos lo tomamos con calma para llegar entrada la tarde y ver a Gaerea. En la pandemia me he vuelto muy blacker (cosas del confinamiento supongo) y cualquier propuesta de la escena me parece interesante. Los portugueses se portaron bien y ofrecieron un concierto a la altura de las circunstancias. Cierto es que otro horario más canalla les hubiera funcionado mejor y que a algunas canciones les falta algo pero no todo el mundo es Mgla. Como siempre el escenario Ritual a la altura de las circunstancias. Otros con sonidazo.

En esta edición he observado un grupo bastante numeroso de chavalada atraída por bandas como Crossfaith y razón no les falta. A los japos le sobran argumentos para convencer de su propuesta: épica, motivación, fiesta, extravagancia, buen sonido… y de nuevo el público del Resu entregado al máximo. Me pilla mayor pero veo claro que a veces esperamos un relevo para según qué bandas de rock tipo AC/DC y quizás los que van a cogerlo son bandas de este tipo. Que si yo tuviera quince años me colgaba un póster en la habitación.

Foto Blowfuse: Alex Belza

Como fan de Blowfuse había que ir a echar un ojo y si me llego a despistar no veo nada. Acabaron quince minutos antes de la hora prevista y por lo poco que pude ver, más de lo mismo (en plan bien, eh). Al menos pude disfrutar de un tema de su anterior formación, Godfarts. En directo lo dan todo y da gusto tener una banda nacional a la altura de la cita. ¿Habéis escuchado Daily Ritual? Ese disco es una pasada.

Y llegó el milagro: Nick Holmes simpático. Os lo juro, que se lo gozó. Que hizo una broma. Que luego nos lo encontramos en el hotel y estaba agradable. Es que todavía estoy allí, clavado, disfrutando del despropósito que creó Bloodbath. Peaceville reedita el día 15 de julio Resurrection Through Carnage y voy loco por pillarlo… Menudo bolazo madre mía. Una auténtica clase magistral de cómo debe sonar una banda de death metal: batería, guitarras, bajo, voz… todo excelente. Ninguna fisura en una hora de concierto. ‘So You Die’, ‘Cancer Of The Soul’, ‘Cry My Name’… menudo desparrame. Sin duda alguna, uno de los bolos del festi.

Foto Mastodon: Alex Belza

Mastodon le está cogiendo el rollo a los grandes escenarios y en breve puede llegar a ser artista de estadio. Empiezan a tener canciones para ofrecer un buen setlist y suenan muy bien. Lo más importante, han mejorado en el tema voces. Personalmente se me empalagan cuando se ponen tan progresivos y estaba mucho más enganchado a los primeros discos que en la actualidad pero eso no quita que den buenas alegrías allí donde van. No se quedaron pequeños en el pedazo de escenario principal y eso no es cosa fácil. La única pega es que luego vendrían Gojira para enseñarles cómo se debe hacer un verdadero show de rock.

Como no hay manera de entender a Master Boot Record nos fuimos a ver a Toundra por vigésima vez en la vida (y me quedo corto). Como siempre unos cracks. La única duda que tengo es hasta cuando serán capaces de estirar el hilo.

Foto Gojira: Alex Belza

Lo de Gojira fue espectacular. Llegaron de rebote como sustitutos de Avenged Sevenfold y no veas… han sabido crecer. Se han hecho grandes y lo han hecho justo cuando tocaba, con un disco debajo del brazo lleno de hits que junto a ya clásicos como ‘Flying Whales’ o ‘Backbone’ hacen del setlist de los franceses algo muy tocho. Por otro lado su puesta en escena está muy cuidada, simple y efectiva. Una lección para el resto de bandas que a veces se complican demasiado la vida perdiendo feeling. Sus vídeos están muy bien pensados y la pirotecnia es muy correcta. El único pero es que al ser horario nocturno se acabaron los wall of death y el crowdsurfing y ya sabemos lo bien que quedaban los bailes folclóricos con estas bestias. Para no olvidar jamás el bolo de 2014 en el Resu. Iba a destacar a Mario Duplantier en las baquetas pero sería injusto, son todos unos máquinas. Otros que en cualquier momento nos llenan un recinto grande.

DOMINGO 3
El culebrón de Korn pues nos dejó momentos buenos como los juegos de palabras por parte de la people en redes sociales rollo “Estamos kornsternados”. Ya lo dije en la intro, lo de las cancelaciones es un problema. Para más inri se ponía a llover, así que nos íbamos a tomar el último día con mucha calma.

Empezamos con Bloodhunter. Y es que Diva Satanica me gusta. Suerte que solo hace gutural porque si se pusiera a hacer gorgoritos no me iba a molar nada. Que siga con su proyecto de siempre aunque sea la frontman de Nervosa ya dice mucho de esta chica. Ofrecieron un recital de death ibérico muy correcto, sin exquisiteces técnicas pero tampoco es necesario siempre ese alarde de calidad.

A Belvedere los escuché sin poder ver nada porque llovía con ganas y quería ver a Bring Me sin haberme empapado hace horas. Ya los había visto en otra ocasión y creo que volvió a ser el mismo ejemplo de entusiasmo hardcoriano.

Foto Knocked Loose: Alex Belza

Muy a mi pesar, me perdería Heaven Shall Burn por dos motivos: no quería mojarme y quería ver a Knocked Loose en primera fila. Tenía la sensación que el bolo de los americanos sería todo un evento como cuando Turnstile tocaron en Viveiro. No fue así. Aún siendo un gran concierto no tienen la magia de estos. Que lo hicieron de narices pero lo de Turnstile es otro nivel. Me quedé un poco out con el tono de su líder. Al llegar a casa me he revisado sus grabaciones para verificar que su voz no es tan aguda en los discos. ¿Estaba cascado de la voz? Pues no sé… pero me chocó. Por lo demás estas bandas que saben hacer este crossover tan true me flipan. Contundencia a raudales, sonidaco y una actitud arrolladora. Me sorprendió también la de peña que se sabía los temas. Para que luego digan que la juventud no estudia.

Al llegar al Main stage para ver a Bring Me me explicaron que habían cortado el sonido a Angelus Apatrida. La banda ya ha explicado su versión a través de las redes, así que poco hay que añadir, aunque es una pena que ocurran estas cosas.

Foto Bring Me The Horizon: Alex BelzaBring Me The Horizon nos regalaron un señor show: rápido, dinámico, efectivo, bonito, emotivo… Como en el caso del frontman de Paradise Lost, nos encontramos a Oliver en la piscina del hotel y ya nos pareció que estaba muy relajado. Lejos quedaba el culebrón con Bad Religion en aquel Resu y todas las tonterías. Los colegas controlan el escenario como nadie y llevan un montaje que luce un montón y eso que prescindieron de pirotecnia. Desde temazos cañeros como ‘Teardrops’ o ‘Dear Dairy’ a la emotiva ‘Drown’ una vacilada de concierto. Todos enormes pero sobre todo Oliver convertido en una estrella brillante y, espero no equivocarme, limpia. De lo mejor que he presenciado en directo en mi vida, así os lo digo.

Y claro, luego tocaron Enforced y estaba molando pero yo seguía pensando en Bring Me y en la bestialidad que había vivido.

Poco más que añadir. Personalmente me gustaría ver más chicas en los escenarios del Resu: Nervosa, Asagraum, Hulder, Crypta, Lingua Ignota, Myrkur, Chelsea Wolfe… hay muchas artistas femeninas que cuadrarían a la perfección con la filosofía del festi y se equipararía un poco el cartel. Solo rezar para que el Resu del próximo año no se celebre en junio y desearos salud para todos. Que me traje muy buenos momentos del festi para casa, pero el COVID también se vino.

Larga vida al Resu.

SERGIO POZO