FECHA: 22 DE JUNIO DE 2022
LUGAR: POBLE ESPANYOL (BARCELONA)
PROMOTOR: CRUÏLLA XXS

Como escribí en la reseña de Cruel Country, el nuevo disco de Wilco me ha servido para reencontrarme con una banda de la que me había ido distanciando en la última década. Ahora solo faltaba sellar la reconciliación acudiendo de nuevo a uno de sus conciertos después de años de ausentarme de ellos.

La oportunidad brindada por el ciclo Cruïlla XXS no podía ser mejor, siendo el Poble Espanyol mi recinto favorito para los conciertos de verano en Barcelona. La noticia, unos días antes, de la baja sustancial de su MVP, el guitarrista Nels Cline, por COVID, sinceramente tampoco me inquietó demasiado. Es más, pese a tratarse del músico más talentoso del grupo, confiaba en que su ausencia obligaría a la banda a tirar de fondo de armario y vestir un repertorio con piezas más acordes a la línea country rock de su obra más reciente. Y así fue.

En Barcelona, y me imagino que por extensión en el resto de la gira, nos encontramos a los Wilco más tradicionalistas y menos vanguardistas, con un Jeff Tweedy asumiendo los eléctricos solos de guitarra, con menos pirotecnia que su compañero, pero con gran pasión en ‘At Least That’s What You Said’ de A Ghost Is Born.

Foto: Eric Altimis

Empezando con las tranquilas ‘I Am Your Mother’ y ‘Cruel Country’ a modo de tanteo, fue la infalible ‘I Am Trying To Break Your Heart’ la que de verdad marcó el inicio del concierto. A partir de ahí alternaron las obligadas referencias a su nuevo disco (‘Hints’, ‘Story To Tell’, ‘All Across The World’, ‘Tired Of Taking It Out On You’…) a las necesarias de Yankee Hotel Foxtrot, que cumple 20 años, con ‘Jesus, Etc.’, ‘War On War’, ‘Heavy Metal Drummer’, ‘Poor Places’ o ‘I’m The Man Who Loves You’.

En todas ellas la banda se volvió a mostrar como un reloj en la que cada pieza -los coros del bajista John Stirratt, la imaginativa precisión del batería Glenn Kotche, la sutileza de los teclados Mikael Jorgensen y la navaja suiza del mutiinstrumentista del discreto, pero carismático Pat Sansone- está al servicio de las canciones y la voz de un Tweedy al que vimos relajado y disfrutando de cada momento.

Foto: Eric Altimis

Pero lo que de verdad marcó la diferencia fueron las múltiples visitas al magistral Being There, el disco de 1996 en el que lograron fusionar como nadie a Gramm Parsons, Alex Chilton, Paul Westerberg y los Beatles. A las deliciosas ‘Sunken Treasures’ y ‘Forget The Flowers’ se sumó un bis épico y efervescente en el que encadenaron ‘Red-Eyed And Blue’, ‘I Got You (At The End Of The Century’), ‘Monday’ y ‘Outtasite (Outta Mind’) con una intensidad que ya les creía olvidada. Que antes hubiera caído una entrañable ‘Box Full Of Letters’ de su debut A.M. fue la guinda de un concierto que nos recordó por qué Wilco siguen siendo un tesoro a conservar.

JORDI MEYA