Alectrofobia son sin duda una de las bandas más activas, reivindicativas y luchadoras de la escena rock chilena de la última década. El power trio editaba en octubre su nuevo disco Era Luz, en plena pandemia mundial y en medio del estallido social contra el gobierno neoliberal de Sebastián Piñera, el cual fue altamente reprimido por la policía, dejando varios muertos y cientos de heridos como resultado.

Es en este ambiente de crisis sanitaria y caos político-social, que la banda ha lanzado un disco redondo, lleno de esperanza, fuerza y con una producción de sonido a la altura para llevar su propuesta más allá de sus fronteras. Charlamos con su bajista y vocalista, Gerardo Elgueta, auténtico motor y corazón de la banda, quien nos cuenta los detalles de este disco grabado en estos tiempos revueltos que nos tocó vivir.

¿Cómo invitarías a las personas que nunca han escuchado a Alectrofobia para que se motivaran a hacerlo?
GERARDO ELGUETA «Nosotros no somos una banda mainstream, somos una banda underground autofinanciada que ha podido destacar en algunos aspectos. Tenemos unos fans muy fieles que nos siguen a todos lados y somos muy sinceros y honestos con ellos. Creo que lo más importante de nuestra propuesta es ésto, lo que tocamos y cantamos lo sentimos y somos capaces de transmitirlo a la gente. El sonido de Alectrofobia enfrenta la sonoridad desde el punk rock hasta el hard rock o inclusive con tintes de post grunge y/o metal moderno, todo expuesto en el formato canción con fuertes y elaboradas melodías. Las influencias pueden ser Muse, Arctic Monkeys, Faith No More, System Of A Down o Rage Against The Machine o bandas en español como Héroes Del Silencio o nuestros queridos Los Prisioneros, banda ícono del rock chileno de los 80 y 90″.

¿Nos podrías contar cómo nace la idea de crear Era Luz? ¿Cuál es el origen del nuevo disco?
«Nosotros veníamos planteándonos la idea de hacer un disco nuevo desde finales del 2019 en pleno estallido social, fuimos muy partícipes con nuestra música y con nuestras letras al respecto, apoyamos totalmente la revuelta. Desde siempre hemos cantado de lo mismo, pero esta vez sentimos que acompañamos un proceso histórico muy importante en lo que es la situación país. Nosotros pensábamos que no íbamos a poder girar el verano pasado porque habían muchas manifestaciones y estaban cancelando gran parte de los eventos pero finalmente pudimos hacer una gira de siete fechas. En ese momento nos dimos cuenta que por primera vez llenábamos todos los lugares de las ciudades a las que fuimos, no nos había pasado nunca antes, siempre había un lugar que tenía menos gente o que algo salía mal. Esta gira del verano 2020 nos hizo ver que teníamos la capacidad de llenar locales en prácticamente cualquier parte de Chile y que la gente se sabía nuestras canciones. El éxito de la gira nos animó a hacer un nuevo disco y llevar la banda un paso adelante».

¿De qué manera Era Luz empezó a tomar forma? ¿Cuéntanos cómo fue ese proceso?
«Estábamos en el último show que fue en Temuco, nuestra ciudad natal, y Rudy nuestro guitarrista me dice que tenemos que hacer un disco nuevo para seguir dando gasolina a la banda. Rudy vive en Temuco y yo vivo en Santiago, ciudades lejanas. Nosotros ya trabajábamos a distancia desde antes de la pandemia. Teníamos un trabajo a distancia súper fluido, yo le mandaba demos, él me las devolvía. Trabajábamos en multipista, donde él me mandaba las guitarras, yo le devolvía los bajos o le devolvía las voces y así podíamos avanzar en la composición. Por lo tanto, empezamos a trabajar en un disco así. Luego comenzamos a tocar en el local de ensayos todas las canciones nuevas y sin darnos cuenta teníamos la mitad del disco compuesto. Hablamos con Mario Breuer, que es productor de nuestro disco y nos propuso ir dos o tres semanas a su estudio en Argentina para terminar el disco allí. Fue una experiencia distinta porque nosotros en general siempre grabamos discos muy rápido, llegamos al estudio, tocamos los tres juntos y en dos o tres pasadas las canciones ya están listas porque siempre ensayamos mucho. Nuestros discos prácticamente se graban en vivo, entonces esta era la primera vez que íbamos a encerrarnos a terminar el trabajo creativo en estudio con un productor de verdad. Estábamos listos para viajar a Buenos Aires para reunirnos con Mario y nos cancelaron los vuelos por el Covid. Mario finalmente aceptó producir y grabar el disco a distancia. Cada uno tuvo que armar sus propios espacios dentro de la casa, ya que ninguno tenemos un home studio gigantesco, sino que tenemos nuestras propias máquinas y esas las fuimos habilitando en espacios de nuestros mismos hogares. Fuimos determinando horarios de trabajo concretos para poder intercambiar ideas y eso también son sacrificios para nuestras familias, nosotros somos padres. Yo estoy casado, entonces tuvimos que adaptar nuestra vida familiar en función de este disco y es bien intenso porque no sólamente es lo que los músicos estamos haciendo sino que todo el entorno. Después empezó a fluir poco a poco, de hecho empezamos a grabar demos y muchas de esas versiones terminaron siendo partes del disco porque nos lo tomamos todo muy en serio desde el comienzo, así es como el disco toma forma a grandes rasgos».

Un proceso distinto más aún estando en pandemia…
«Tomamos la decisión de comprar algunos equipos, a pesar de que no teníamos tanto presupuesto para poder hacerlo, entonces tuvimos que conseguirnos varias cosas prestadas, sobre todo para grabar lo de la batería. Además tuvimos la asesoría profesional de Mario Breuer, que es un productor veterano que ha trabajado con todos los ídolos musicales argentinos como Charly Garcia, Luis Alberto Spinetta o Andrés Calamaro, entonces su guía y su contención espiritual fue sustancialmente importante. Mario nos recomendó masterizarlo en Sterling Sound en Estados Unidos con Greg Calbi, un veterano ingeniero que ha trabajado con leyendas como David Bowie, Bob Dylan, John Lennon, Bruce Springsteen o Iggy Pop entre otros. Un auténtico honor trabajar y aprender de estos dos cracks».

¿Crees que trabajar con estos reconocidos profesionales supuso un punto de inflexión en la carrera de la banda?
«Siendo bien franco, yo creo que esa inflexión se genera en Violenta Fortuna, que es nuestro disco anterior. Fue un disco que nos abrió muchas puertas. Hizo que la banda fuera mucho más conocida y por primera vez empezamos a vender más tickets. Antes de sacar Violenta Fortuna nosotros movíamos poca gente, nos costaba mucho llenar locales y no necesariamente porque lo que estábamos haciendo era malo, sino que estábamos en un nivel que probablemente no era lo suficientemente atractivo para atraer a más público. Cuando lanzamos Violenta Fortuna anunciamos un show y se agotó dos semanas antes. Luego hicimos otro show que también se agotó semanas antes. Entonces nos planteamos hacer algo más grande y nos atrevimos con un show en el Teatro Cariola, donde conseguimos meter 1200 personas. Estamos planificando otro concierto para un local más grande el próximo año, si es que se puede por la pandemia. Ahora bien Era Luz marca un hito sonoro que es distinto porque una cosa es el crecimiento de la banda y público y otra cosa es lo sonoro. Éste último disco suena muy bien, yo estoy muy satisfecho y contento con el resultado, lo puedo poner a comparar con cualquier disco internacional y la pelea es de igual a igual. Eso es algo que con el disco anterior no pasó».

Con Era Luz es el momento de internacionalizar vuestra carrera. ¿Cómo ha sido el salto a un público internacional?
«Nosotros habíamos estado en Argentina y en Colombia de gira y cada vez que estábamos en otros países sentíamos que no había un gran impacto en lo que estábamos haciendo, sino que nos ayudaba a crecer más en Chile pero de repente hubo un interés por parte de medios de comunicación extranjeros. Uno de nuestros grandes momentos fue cuando el Billboard de Latinoamérica nos destacó como uno de los discos más interesantes y más atrayentes del año. Nuestras letras han sido un punto de lanza para que la banda crezca puesto que no hay mucho que interpretar, sino que hay letras muy literales y claras, y eso es algo que también la prensa internacional ha destacado. Que hoy podamos hacer un lanzamiento internacional, que lo cubra Rolling Stone en Colombia, Summa Inferno en México, Rockzone Magazine en España o Sonar FM en Chile y que lo hagan de manera simultánea, o que además en Chile nos pongan en la portada de Rockaxis, que se destaque entre los mejores discos del año o que nos hayan nominado a los premios Musa de Iberoamericana Radio, es un orgullo. La idea es crecer no sólo en la recepción de la prensa internacional sino también ganarnos al público de dichos países girando y tocando en ellos cuando la pandemia lo permita».

«Era Luz es un plebiscito, porque está buscando cambios significativos» GERARDO ELGUETA

Además de lo orgánico que se fue dando todo, ¿tenéis algún plan concreto?
«Este año íbamos a ir a Europa por primera vez y también queríamos volver a Colombia, además estábamos tratando de ir a México. Las ganas de internacionalizar la carrera siempre están, siempre hay planes para que la banda crezca. Este mes acabamos de tocar por streaming en el 20 aniversario de la revista Rockaxis aquí en Chile y también vamos a estar tocando en un festival súper grande que es el Concierto para Delinquir, que es un evento que se hace en Bogotá, que este año será también por streaming, donde tocan grandes bandas de Colombia y nos invitaron. Se trata de un festival benéfico para juntar fondos para financiar las necesidades de los presos políticos. Terminar el año haciendo un evento nacional bien grande y otro internacional es bien gratificante.

Volviendo un poco atrás, tú contabas que se habían inspirado en el estallido social para escribir el disco Era Luz. ¿Qué tanto de eso hay en este nuevo proyecto y cuáles fueron las principales inspiraciones?
«Me dieron una analogía muy buena, Violenta Fortuna es una barricada, que pasaba por una era muy violenta y un disco muy de la calle y Era Luz es un plebiscito, porque está buscando cambios significativos. Probablemente los mismos cambios que están protestando en la calle, es un disco más reflexivo. Vivimos la misma rabia, el mismo dolor, las mismas cosas pero ahora puedo cantarlo con 32 años y no con 26. Uno empieza a vivir la vida de una manera distinta y a mirar los procesos de otra forma. Mucha gente me dijo que estas letras se fueron a otro nivel de conceptos, de cómo decir las cosas. Obviamente hay descontento, muchas cosas están inspiradas del estallido social pero también más allá de eso, nosotros somos una banda de Temuco y desde niños vimos la violencia policial, la violencia estatal, para nosotros estuvo normalizado. Yo vivía cerca de la Universidad de las Fronteras y desde siempre vi cómo los estudiantes eran apaleados brutalmente por la policía. Por lo tanto todo eso, sumado a lo de hoy, fueron de gran inspiración e influencia para las canciones de este disco».

¿Estáis planeando o componiendo cosas nuevas o estáis en un momento de pausa?
«Queremos tocar en vivo, hemos hecho algunos shows que todavía no salen, pero son varias cosas por streaming. Tenemos un proyecto en mente que ojalá podamos hacer el segundo semestre del próximo año, ya que ahora contamos con un gran equipo de trabajo, no solamente estamos los músicos y los técnicos de escena sino que también tenemos audiovisuales, iluminadores, artistas visuales que nos ayudan a planificar un show que sea una experiencia».

FERNANDA MARTÍNEZ y GABRIEL ZÁRATE