Pese a que se concibió mucho antes de la pandemia del coronavirus, el nuevo disco de All Time Low llega en el momento oportuno. Wake Up, Sunshine no será una vacuna contra el COVID-19, pero al menos ayudará a levantarte el ánimo.

Después del más oscuro y urbano The Last Renegade, a los componentes de All Time Low -Alex Gaskarth (voz, guitarra), Jack Bakarat (guitarra), Zack Merrick (bajo) y Rian Dawson (batería)- les apetecía volver a hacer un disco más luminoso y optimista. Para ello decidieron volver a componer al estilo que lo hacían en sus inicios: con los cuatro músicos juntos bajo un mismo techo. Pese a que su primer intento, a principios del año pasado en Nashville, ciudad en la que reside el batería, no acabó de funcionar, unos meses después la chispa surgió de nuevo y el resultado es Wake Up, Sunshine (Fueled By Ramen), un trabajo en el que encontramos el entusiasmo de sus primeros discos con la madurez compositiva que han adquirido en sus 17 años de carrera.

De su octavo álbum tuvimos la oportunidad de charlar con el frontman de la banda de Baltimore, aunque antes le empezamos preguntando por otro proyecto musical en el que ha estado involucrado.

En el último año has estado muy centrado en Simple Creatures, tu proyecto con Mark Hoppus de Blink-182. Supongo que para ti tuvo que ser todo un sueño poder trabajar con él.
ALEX GASKARTH “Sí, desde luego fue surrealista. Es una dinámica interesante porque conozco a Mark desde hace muchos años y somos buenos amigos, así que no empecé el proyecto desde la perspectiva de un fan, sino simplemente como colaboradores. Pero había momentos en los que pensaba ‘Dios mío, esto es una locura’. Si me hubieran dicho a los 14 años que estaría grabando con Mark de Blink-182 no me lo hubiera creído. Estoy muy contento de que saliera bien porque Mark es uno de los responsables de que quisiera meterme en el mundo de la música. Blink-182 fueron quienes me inspiraron a coger una guitarra y tocar rápido y alto. No estaría aquí sin su influencia”.

¿Tenéis previsto hacer más cosas juntos?
“Sí, desde luego. Tenemos el compromiso de seguir haciéndolo. Sacamos dos EPs para presentarnos al mundo, pero creo que todavía estamos dando nuestros primeros pasos. Cuando tengamos tiempo volveremos a hacerlo, seguro. Me hace mucha ilusión trabajar con Mark”.

¿Y cuándo empezaste a pensar de nuevo en All Time Low?
“Empezamos a componer en enero del año pasado, pero en aquel momento no estábamos pensando en serio en hacer un disco nuevo. Simplemente nos reunimos en el estudio de Rian en Nashville para crear. Era como una especie de prueba para ver qué pasaría al juntarnos de nuevo. Y de hecho, al final algunas de esas ideas han terminado en el disco. Luego nos tomamos un descanso e hicimos otras cosas. Como decías, yo estuve durante unos meses liado con Simple Creatures, pero en cuanto volvimos a tener un periodo libre, en verano, nos volvimos a reunir. Esta vez alquilamos una casa en Palm Desert, en California. Estuvimos viviendo los cuatro juntos con nuestro productor Zakk Cervini y repasamos todo lo que habíamos hecho en enero y compusimos cosas nuevas. Fue realmente allí cuando la idea de hacer un álbum nuevo de All Time Low empezó a tomar forma. Sentíamos que era el momento de hacerlo”.

¿Cómo describirías ese sentimiento? ¿Se trata simplemente de que os gusten las canciones o hay algo más?
“Yo diría que es una combinación de varias cosas. Para empezar, nos tienen que gustar las canciones, claro. Tienes que sentir que te apetecerá tocar estas canciones durante el resto de nuestra carrera. Pero también es importante que todo tenga una cierta coherencia. A veces, cuando empiezas a probar ideas no siempre funcionan juntas. Pero en esta ocasión, sentíamos que eran piezas de algo mayor. Pero también se trata de estar preparados para hacer un disco. Cuando nos reunimos en enero, mentalmente no estábamos con la cabeza para ponernos a grabar. Yo especialmente estaba pasando por una especie de bajón anímico. Pero en Palm Desert ya notamos que algo había cambiado y nos sentíamos con fuerzas para hacerlo”.

En comparación con vuestros primeros discos, los dos últimos, Future Hearts y Last Young Renegade, fluían muy bien. ¿Prestáis más atención a ese aspecto ahora pese a que el mercado se basa más en singles?
“Para mí siempre es importante que haya una conexión entre los temas. No iría tan lejos como llamarlos discos conceptuales, pero me gusta que cada álbum tenga su propia narrativa y que cuando lo escuchas de principio a fin, sientas que todos los temas forman parte de una misma obra. Es algo que tenemos en consideración, sí”.

Ahora ya estáis en vuestros 30 y, naturalmente, os apetece hablar de cosas que os afectan en este momento de vuestras vidas que seguro son muy distintas a cuando empezasteis la banda en 2003. ¿Qué hace que All Time Low siga siendo un buen vehículo para hacerlo?
“Claro, ya no somos adolescentes haciendo ese tipo de música. Lo importante es crecer, estar abierto y tener un nuevo punto de vista. Tu esperanza es que tus fans estén dispuestos a seguirte en este viaje. Ya no escribo desde la perspectiva de un chaval de 17 ó 18 años. Algunas de las canciones son historias, otras son reflexiones, otras tratan sobre cosas que veo a mi alrededor o a gente cercana a mí, pero todo lo hago desde mi perspectiva actual, no quiero hacer nada que no sea genuino o forzado. La manera más fácil es ser honesto contigo mismo y pensar en cómo te sentirás cantando algo desde el escenario todos los días. Tener eso en cuenta es algo que me ayuda mucho a la hora de escribir”.

Madurar nunca es fácil para las bandas que vienen del pop punk, muy a menudo la gente se queda con la imagen inicial de un grupo y no hay manera de sacarla de ahí. ¿Crees que All Time Low lo habéis conseguido?
“No lo sé. Supongo que todo el mundo tiene una idea preconcebida sobre lo que una banda de pop punk puede hacer o no. Pero sinceramente, ahora mismo no nos considero una banda de pop punk. De hecho, nunca nos he considerado dentro de esa etiqueta. Creo que tenemos influencias del pop, del punk, del rock, e intentamos casarlo todo de la mejor manera. Algunos temas tiran más al rock o al punk, y otros más al pop. All Time Low nos sentimos muy cómodos en ese espacio más amplio y creo que es lo que nos ha permitido seguir sintiéndonos inspirados. Eso es importante”.

Esa mentalidad abierta es la que os ha llevado a colaborar con Blackbear en el tema ‘Monsters’, supongo.
“Sí. Somos amigos de Blackbear desde hace un tiempo, pero nunca habíamos pensado en colaborar. Pero escribimos ‘Monsters’ con nuestro amigo Andrew Goldstein, que también la produjo, y él había estado trabajando con Blackbear en su nuevo disco, así que fue él quien hizo la sugerencia. Tenía una energía parecida a lo que había estado haciendo con él y pensó que molaría unir los dos mundos. Le mandamos la canción y grabó la segunda estrofa, y la verdad es que encajaba a la perfección. A veces haces colaboraciones y el resultado no acaba de tener sentido, pero en este caso lo tenía. Una de las cosas que más me gusta es que creo que nadie lo esperaba, porque nunca habíamos tenido a alguien de otro estilo haciendo algo así. Cuando llevas siendo una banda durante 16 años es complicado encontrar nuevos trucos, así que tener el talento de Blackbear nos ayudó a cumplir ese propósito”.

Y también están The Band Camino en ‘Favourite Place’…
“Sí, ellos están en nuestro sello y estoy muy feliz de ver lo rápido que han logrado establecerse. Cuando escribí el tema, lo escuché y, por algún motivo, pensé en ellos. Era como si pudiera escuchar su influencia, y como les respeto y escucho mucho su música, pensé que era justo que pudieran formar parte de ello. Me alegró mucho que dijeran que sí porque hicieron que la canción fuera mucho mejor”.

El primer single que lanzasteis, ‘Some Kind Of Disaster’, me parece de los mejores temas que habéis hecho. ¿Pensaste que era algo especial cuando la escribiste?
“La verdad es que sí. Cuando la escribimos sentimos que sería un tema que formaría parte de nuestro catálogo de ahora en adelante. Creo que es un tema que puede gustar tanto a los viejos fans de All Time Low como a los nuevos. Creo que es una pieza muy sólida. Cuando llevas tanto tiempo en un grupo, empiezas a desarrollar una intuición para saber qué temas son especiales, y éste lo era. Para mí tenía una energía especial y vi claro que tenía que ser lo primero nuevo que escuchara la gente. A veces tienes dudas sobre qué lanzar como primer single, pero en este caso, lo tuvimos muy claro. Eso nos quitó mucha presión”.

Fuera de All Time Low has escrito canciones para otros artistas. ¿Te arrepientes de no haberte guardado alguna para la banda?
(Risas) En realidad no. Cuando escribo para otra gente, estoy trabajando para ellos. Desde el principio sé que la canción será suya y que mi trabajo es ayudarles en el proceso, así que nunca me he arrepentido de no quedarme un tema para All Time Low (risas). Pero tengo que decirte que hay temas que me encantan, como ‘Criminal’ de State Champs… es una de mis canciones favoritas que haya escrito. Me gustó mucho cómo la hicieron y encaja a la perfección con lo que hacen. Me gusta escuchar esa canción y sentir mi influencia”.

Hoy en día es muy difícil para los grupos mantener una formación estable. ¿Cuál dirías que ha sido vuestro secreto?
“Creo que el secreto es que nos tratamos como una familia. Cada uno de nosotros se siente una parte fundamental del grupo. Creo que las bandas empiezan a tensionarse cuando los egos se meten por medio. Nosotros somos como hermanos, nos cuidamos, nos apoyamos, pero no nos metemos en la vida de los demás. Creo que eso nos ha unido, en lugar de alejarnos. Y también hemos tenido suerte, supongo. Hemos tenido mucho éxito, pero lo más importante es que nos seguimos divirtiendo. Poder reírte, incluso en los momentos malos, es lo más importante”.

¿De qué te sientes más orgulloso y qué sientes que os falta conseguir?
“De lo que me siento más orgulloso es de nuestro legado. No es habitual que un grupo tenga éxito durante tantos años. Es un honor poder seguir haciendo música con la banda. Y sí, todavía nos quedan cosas por hacer. Nuestros conciertos siguen creciendo, pero me gustaría poder compartir nuestra música con todavía más gente, traspasar generaciones”.

¿Te gustaría que All Time Low llegaran a ser un fenómeno como el de BTS?
(Risas) No, pero creo que es maravilloso ver un fenómeno global así. Es inspirador. Me encanta lo que hacen y cómo lo hacen. Es salvaje ver el alcance que puedes conseguir a través de la música. Me encanta ver que artistas de otras culturas puedan llegar al mainstream. Creo que el streaming ha roto las barreras y, al final, la música logra por sí misma llegar a todas partes sin importar la lengua o la cultura de la que provenga”.

DAVID GARCELL