Con la aparición de su nuevo disco Pare Nostre Que Esteu A L’Infern, Crim certifican que no están aquí para perder el tiempo. Su tercer álbum en cinco años es una nueva colección de himnos combativos contra ese sistema que nos tiene pillado por los huevos.
Hace un par de años, los cuatro miembros de Crim tomaron una de las decisiones más difíciles que tiene que afrontar cualquier músico: dejar la estabilidad económica que les proporcionaban sus anteriores trabajos para lanzarse al vacío y convertir el grupo en su máxima prioridad. Aunque no fue fácil y todavía está por ver si su locura tendrá alguna recompensa, Adri Bertran (voz, guitarra), Quim Mas (guitarra), Javi Dorado (bajo) y Marc Anguela (batería) no se arrepienten. Desde que iniciaran esta aventura en 2011, el ascenso de Crim ha sorprendido, como se suele decir, a la propia empresa.
Ya en su cuarto concierto notaron que algo distinto estaba ocurriendo a lo que habían vivido en sus otros grupos, The Gundown (donde milita el hermano mayor de Adrià, Beni) o Caza De Brujas. La gente cantaba sus temas, las 300 copias de su primera maqueta se vendieron en apenas tres semanas, y cada vez recibían más comentarios en las redes sociales. Las buenas sensaciones se confirmaron durante la gira de presentación de su primer album homónimo, publicado en febrero de 2014, en la que empezaron a ver a un montón de gente, que no conocían, luciendo sus camisetas con su ahora ya icónico logo de la soga. La curva siguió ascendiendo imparablemente con la aparición de Blau Sang, Vermell Cel y una agenda de conciertos que les llevó a recorrer Europa y dar el salto a Estados Unidos.
Unas semanas antes de la aparición de Pare Nostre Que Esteu A L’Infern (HFMN/BCORE), en el que volvemos a encontrarnos con esa voz rota de Adrià, esos coros tan característicos y, eso sí, algunos punteos más heavies, quedamos con ellos en una terraza enfrente de nuestra redacción para que hagan balance de su momento actual. Alrededor de una mesa con cañas y vasos de whisky, orujo y pacharán, las reflexiones y las risas no tardan en salir.
Habéis sido capaces de componer y grabar un nuevo disco en poco tiempo. ¿Queríais ir a piñón para aprovechar la buena racha?
QUIM MAS “Justo cuando salió el anterior disco ya empezamos a hablar del siguiente. Estábamos tocando cada fin de semana y no queríamos que la gente acabara hasta las pelotas del mismo setlist. Queremos sacar un disco cada dos años. En parte sacar el EP también fue una excusa para tener dos temas más de margen para ir cambiando. Es que tocamos mucho”.
MARC ANGUELA “La primera reunión que tuvimos al cabo de dos meses para hablar sobre cómo estaba yendo el disco, ya dijimos que teníamos que ponernos las pilas para el siguiente. Más que nada, para reservar fecha con Santi (Garcia) porque él trabaja a un año vista. Así que teníamos que grabar a principios de 2018, aunque no empezamos a componer hasta mediados de 2017”.
ADRI BERTRAN “¡Eso lo dirás tú!”.
MARC “(Risas) Me refiero los cuatro juntos. Igual tú habías avanzado, pero nosotros no habíamos hecho nada. Supongo que a principios del año que viene volveremos a reservar para el siguiente”.
JAVI DORADO “Tampoco te puedes tirar tres años tocando las mismas doce ó 15 canciones. Al final la gente no te va a ver si tocas siempre lo mismo”.
ADRI “Por culpa, o gracias al disco anterior, tocamos mucho más de lo que hubiéramos pensado, y eso también ha comprometido nuestras vidas. Ya que nos hemos tirado a la piscina, y tocamos cada fin de semana, el resto de días podemos probar cosas nuevas. Es una consecuencia de la buena acogida que tuvo el disco anterior”.
¿No creéis que seguir con este ritmo puede ir en contra de vuestra evolución y entrar en el síndrome Bad Religion, que la gente diga ‘esto ya lo he oído antes’?
QUIM “Nosotros cuando hacemos temas no nos planteamos lo que pensará la gente. No evolucionamos mucho, pero cada vez metemos cosas nuevas. Cada vez nos cortamos menos si algo suena más heavy o más popero. Nuestra evolución es limitarnos cada vez menos. Somos una banda de punk rock, pero hay otros elementos en los que también nos sentimos cómodos. Todo lo hacemos desde la sinceridad”.
MARC “Yo creo que del primero al tercero hay una evolución flagrante, pero no dejamos de ser Crim. Escuchamos cosas nuevas y entran nuevas influencias. Hace seis años no hubiéramos escuchado a Ghost. Y hay cosas evidentes de ellos, aunque la gente no las note. O si llevo un mes escuchando a Propagandhi y tengo que hacer una canción, pues también se va a notar”.
ADRI “Tampoco un disco nuevo tiene por qué ofrecer nada nuevo más allá de los temas. Somos la misma banda con la misma gente. No vamos a poner trompetas o un pasaje acústico”.
JAVI “Cada uno aporta lo que le sale, pero somos una banda de punk rock”.
¿Tampoco tenéis ganas de descansar un poco?
ADRI “Yo no”.
MARC “No creo que podamos descansar. Si paramos, el ritmo se rompe. Decidimos subirnos a este tren y complicarnos la vida a saco, sobre todo con el tema del trabajo, porque tienes que encontrar algo que sea compatible con este tipo de vida. Ahora no podemos bajar del tren”.
JAVI “Somos un grupo joven, llevamos siete años, ahora es el momento de tocar todo lo que podamos y tirar para adelante”.
Esta idea de subirse al tren, ¿fue algo que consensuasteis entre todos o ha sido que el tren os ha pasado por encima?
QUIM “Un poco sí. Hubo algunos conciertos en los que se nos complicaron un poco las cosas, porque Javi y yo trabajábamos de noche, y de manera natural, casi a la vez, decidimos dejar todos nuestros curros normales. Lo teníamos que hacer por huevos si queríamos seguir”.
JAVI “Era el momento. Si quieres tocar por Europa y en festivales, no puedes tocar de lunes a viernes hasta las diez de la noche. Era imposible hacerlo todo”.
¿Qué trabajos teníais y cuáles tenéis ahora?
JAVI “Yo trabajaba en una imprenta, de diseñador y de impresor. Por una vez que pedí salir una hora antes para ir a tocar, con dos meses de antelación, ya me liaron un pollo. Vi que era incompatible, una cosa o la otra. Ahora me busco la vida como puedo (risas). Lo que está claro es que el grupo tampoco da para vivir, aunque alguna gente lo crea. Te vas a tocar a Berlín y te conocen 30 personas. En Viena vinieron seis”.
MARC “Yo era arquitecto técnico, no iba de traje, pero tenía reuniones con gente que odiaba. Me fue de puta madre hacer el cambio porque hacía tiempo que me rondaba por la cabeza. Si cantamos contra algo es contra a lo que yo me dedicaba. Trabajaba con bancos, con constructoras, con aseguradoras… Fue la oportunidad perfecta para dejarlo. Ahora trabajo en una agencia (HFMN -ndr.) con un jefe que es un cabrón, pero guay (risas). Mi nivel de vida ha bajado un 60%, he perdido cosas, pero he ganado otras, que es dedicarme a lo que me gusta”.
¿Y vuestro entorno qué dice?
MARC “A nivel familiar o de amistades todo el mundo te dice que estás loco. Pero mi madre ayer me mandó un mensaje porque había visto un documental sobre un chico que también lo había dejado todo para hacer lo que le ilusionaba. Al final, si te ven bien, todo está bien”.
JAVI “Es complicado llegar a casa y que tu padre te pregunte cuándo buscarás un trabajo decente. Eso, así de veces”.
QUIM “Yo he tenido suerte y me han apoyado bastante. Yo trabajaba de vigilante de seguridad y tocando con un grupo de versiones de hard rock en el que sigo”.
ADRI “Yo soy técnico de sonido, y a la que pueda siempre denunciaré porque, Víctor, hijo de puta, págame todo lo que me debes. Siempre jugaba a no decirme las fechas que tenía que trabajar, y el 11 de septiembre de hace dos años, yo tenía un concierto muy grande con él, con mucho dinero, pero lo que hice fue no presentarme y subirme a la furgo con mi grupo. Sabía que no me pagaría, pero me fui feliz. En mi casa siempre te dicen que la vida no es una película y que puede no salir bien, pero al final un curro de mierda siempre lo puedes encontrar. Si no lo hacemos ahora, estaremos amargados toda la vida”.
¿Creéis que dar este paso es a lo que no se atreven muchos grupos que por otro lado se quejan mucho?
ADRI “Yo creo que no. No te lo tienes que plantear sentado en una mesa, sino es algo que ocurre de manera natural. Es una cuestión de oferta-demanda. Nosotros no sabíamos que había una demanda, pero de golpe ves que cada vez te llaman más. Creo que es un error como banda apuntar a lo alto, tú tienes que hacer lo que a ti te gusta, y si tienes la gran suerte de que guste y de que cada fin de semana estés tocando, al final lo tienes que poner en la balanza. No nos hemos obligado a nada. Al final tu situación personal te lleva a tomar esa decisión”.
JAVI “Tú no haces un grupo pensando que de aquí tres años ganarás un pastizal y podrás dejar tu trabajo. Tú tocas porque te gusta tocar. Esto que nos está pasando les ha pasado a muchos grupos y a otros no. Pero hay que tener el valor de hacerlo. Hay que renunciar a la comodidad de tener un sueldo cada mes. Todo tiene su sacrificio”.
También te das cuenta de que con menos se puede vivir.
MARC “Claro, yo empecé a quitarme recibos de encima y vivo con lo mínimo. Las pasas canutas y ya está. Al final, con menos eres más feliz porque te tienes que preocupar de menos cosas. A mí, esta filosofía de vida, ya hacía tiempo que me rondaba. Si tienes muchos ingresos, tienes muchos más gastos, y al revés”.
JAVI “Yo siempre he sido mileurista y creo que vivir con menos de eso es una indecencia. Antes ya vivía justo y ahora vivo todavía más justo. Es un puto agobio (risas)”.
MARC “El agobio lo puedes tener siempre en todos los niveles. Lo que pasa es que este sueño que estamos viviendo también es una pesadilla porque nunca tienes vacaciones. Trabajas en algo de mierda entre semana y los fines de semana estás tocando. ¿Dónde está la vida familiar? ¿Dónde está el ocio? Yo he dejado muchas cosas para poder dedicarme a esto”.
ADRI “Yo siempre he estado acostumbrado a los límites de la miseria, y con menos estás en la miseria directamente. O vuelves a casa de tus padres o malvives como puedes. Pero al final te acostumbras a tirar como sea y a tener una visión de futuro”.
Si habéis dado este paso es porque el grupo os ofrece algo a cambio. ¿Qué es lo que compensa más, la dinámica interna de estar los cuatro juntos haciendo música o el salir a tocar y el contacto con la gente?
JAVI “Eso depende de cada uno, pero es que tocar en un grupo mola mucho. Nos conocemos de hace muchos años”.
ADRI “Para mí son las dos cosas. Me encanta componer en casa, es de mis cosas favoritas. Pero también lo es salir a tocar y ver que a la gente le gusta lo que haces”.
QUIM “A mí me flipa preparar el disco y producirlo. Yo con eso ya sería súper feliz, pero si encima a la gente le mola, pues ya es la hostia”.
MARC “Yo a veces me planteo si todo esto merece la pena. Después de dos semanas llegas a casa sin dormir, sin ver a tu pareja, sin nada en los bolsillos… pues claro que te lo planteas, pero al final estoy aquí. Es mi sueño desde que tenía 12 años y empecé a escuchar punk rock”.
¿Cuándo te das cuenta de que ese sueño no es real?
ADRI “Cuando compartes camerinos con bandas muy grandes y te das cuenta de que van a trabajar. Son gente normal que tienes idealizada, pero que al final le han encontrado la trampa a ese sueño. Para mí merece la pena. Yo quiero estar ahí porque la música es lo que le ha dado significado a mi vida. Si lo dejáramos, siempre me quedaría la duda del ‘¿Y si…?’”.
¿Pero en qué se tendría que concretar ese ‘¿Y si…?’?
ADRI “En tener una vida más relajada. Que no tuviéramos que dedicar tantas horas a sobrevivir, sino a simplemente poder tocar. Todavía estamos muy lejos de ese punto. Pero hay que pasar por esto si queremos llegar a lo otro”.
QUIM “Yo creo que el sueño lo tienes cuando eres un chaval y te crees que serás Guns N’ Roses, pero a nosotros cuando empezamos con Crim ya se nos había pasado porque llevábamos años tocando en garitos de mierda, perdiendo pasta. En la vida habíamos ganado pasta haciendo punk. En un año hemos hecho tres giras europeas, hemos ido a Estados Unidos, y para mí eso ya es un sueño, aunque no seamos Guns N’ Roses (risas)”.
ADRI “Para mí es la única cosa que hecho en la vida por la cual se me ha aplaudido. La sensación que he tenido con la banda no la he tenido con nada más. No renunciaría a esto por nada”.
JAVI “Mi caso es un poco distinto porque éste es mi primer grupo. Nunca había tenido aspiraciones. No sabía ni tocar un instrumento. Para mí a los 30 años ponerme a tocar estaba súper lejos. Eso de irse a tocar a Estados Unidos me lo dices hace cinco años y… es un constante ‘quién lo diría’. Marc y Quim llevan toda la vida tocando, pero cuando empiezas a los 30 para hacer algo cuando sales del trabajo no aspiras a una mierda. Las cosas como son (risas)”.
¿Creéis objetivamente que Crim es un grupo mejor que Caza De Brujas o The Gundown y que por eso ha tenido mejor acogida?
JAVI “No creo que podamos decirlo nosotros”.
MARC “A mí personalmente me gustan más los temas de Gundown. Quizá a la gente le gusta esto porque es más comercial, aunque no sea la intención. Es muy subjetivo”.
QUIM “Al principio nos tomábamos más en serio nuestras otras bandas que Crim. Yo creo que una parte de que nos vaya bien es porque cantamos en catalán. Los primeros temas que trajo Adri eran en inglés, pero nos pareció más fácil hacerlo en catalán para recordar las letras”.
JAVI “Sobre todo en el momento en el que lo hicimos. En 2010 empezó a haber un resurgir del punk en catalán y ahora hay bandas por todos los lados. Si lo hubiéramos hecho en el 95 nos hubiéramos comido un ñordón gigante”.
MARC “O si hubiéramos empezado en 2014, hubiéramos sido una banda más. Creo que nos encontramos en el punto adecuado en el momento adecuado”.
ADRI “A todo esto yo llevo orgulloso un tatuaje de The Gundown. Mi hermano es el que me descubrió muchos grupos y me flipa The Gundown. Cuando empecé me daba un poco de vergüenza enseñarle temas porque me parecía una versión mala de lo que hacían ellos. Yo no tenía banda y empezamos esto para pasar el rato entre semana. Sinceramente, creo que cantar en catalán ha sido lo más decisivo, no creo que tengamos mejores temas que The Gundown”.
JAVI “Pero no sólo es eso, porque vamos a tocar a Durango, donde la gente no entiende nada, y está reventado. O en Europa la gente aplaude, y tampoco entiende nada”.
MARC “Por el que nos haya ido tan bien aquí es lo que nos ha permitido salir fuera. Cosa que no nos ha ocurrido con Gundown”.
Adri, ¿y cómo se toma tu hermano todo lo de Crim?
ADRI “Creo que entiende perfectamente la situación. Creo que disfruta igual haciendo lo suyo como yo lo mío”.
QUIM “Beni no tiene aspiraciones…”.
ADRI “Como tampoco las teníamos nosotros, pero todo el apoyo que hemos tenido aquí al final se contagia un poco fuera. Como mínimo provoca curiosidad, en plan ‘¿Quiénes son estos Crim?’. Al menos te dan la oportunidad de escucharte. Creo que ése es el secreto”.
“En la época en la que vivimos, si no hay punk es para tirarse por la ventana»
El sentido reivindicativo de las letras, ¿es algo que os viene a nivel familiar o algo que habéis cultivado por vuestra cuenta?
QUIM “No. Es por la música que hemos mamado desde pequeños”.
ADRI “En la época en la que vivimos, si no hay punk es para tirarse por la ventana. Te pueden vender la moto con que el trap es el nuevo punk, pero al final es gente que reivindica la pasta que gana en conciertos de mierda con Auto-Tune. La única manera que tenemos de desahogarnos es quejarnos, al menos”.
JAVI “La música punk, si no tiene un mensaje reivindicativo o social, no es punk. Hay miles de grupos de punk que no dicen nada, aunque te molen musicalmente. Pero ya que tienes la oportunidad de que haya gente que te escucha, al menos haz llegar un mensaje”.
ADRI “Es una manera de irte a dormir tranquilo. No vamos a vender nada, pero te crees lo que dices. Si tu mensaje es real, es más fácil que la gente te crea. Creo que es otro de los secretos”.
Con toda la situación política que se vive en Catalunya, me imagino que se os coloca directamente en un bando. ¿Es algo que os incomoda?
ADRI “Depende. Si el bando es Catalunya o España… Creemos que los problemas están más en la raíz. Para nosotros los bandos son los que están a favor del sistema y los queremos cargárnoslo. Prefiero hablar de eso que de banderas, porque cada uno puede tener el sentimiento que quiera. Cada uno tiene su opinión, pero no queremos hacerlas partícipes en el grupo”.
JAVI “Lo que está claro es que nos consideramos un grupo de izquierdas. Siempre vamos a reivindicar políticas sociales, y la patria… que cada uno escoja la que quiera”.
MARC “Nuestra reivindicación es más social que política. A mí las banderas me dan vergüenza. Todas”.
ADRI “Lo que pasa es que la izquierda es mucho más autocrítica que quien simplemente quiere llenarse los bolsillos, y entonces ahí también hay muchos matices”.
QUIM “Nosotros tenemos ideas políticas parecidas, pero no iguales”.
¿Y creéis que el grupo os ha hecho mejores personas?
MARC “Yo no tendría un grupo con malas personas. No sé si el grupo tiene que hacerte mejor persona”.
ADRI “Creo que eres mejor persona cuando eres feliz, y eres feliz cuando haces lo que quieres”.
JORDI MEYA