Con su tercer álbum Eternal Forward Motion, Employed To Serve confirman su candidatura como una de las bandas más interesantes de la escena británica. Tralla sin concesiones, pero con la mirada puesta en el horizonte.

El amor mueve montañas o en el caso de Employed To Serve, nucas. La pareja, creativa y sentimental, formada por la vocalista Justine Jones y el guitarrista Sammy Urwin ha conseguido transformar o que era un proyecto de grindcore con el apoyo de una caja de ritmos en una banda en toda regla capaz de impresionar a cualquiera que se atreva a compartir escenario con ellos. Después de agitar el underground con sus dos primeros trabajos, Eternal Forward Motion ha aparecido en el mercado con el apoyo de un sello importante como Spinefarm y grandes críticas en los medios especializados de su país. Combinando una base groove, con riffs más técnicos, la visceralidad vocal de Justine y unas letras inteligentes sobre los obstáculos de la vida moderna, Employed To Serve bien merecen nuestra/vuestra atención.

Vuestro nuevo disco está causando bastante expectación. ¿Cómo lo lleváis?
JUSTINE JONES “¡Muy bien!. A raíz de sacar el disco anterior nos ofrecieron tocar en el Download Festival y surgieron otras oportunidades. Y creo que ahora estamos recogiendo los frutos de todo lo que hicimos. Será interesante ver lo que pasa”.

Esta semana incluso salís en la portada de Kerrang!.
“Sí, ha salido hoy (risas). Se me hace rarísimo ver mi cara en los quioscos. Son cosas que ni siquiera había soñado porque no pensaba que fueran posibles. Hace un par de años compartimos portada con Milk Teeth, pero ésta es la primera que nos la dedican sólo a Employed To Serve. Es una pasada”.

¿Cuándo empezasteis con el grupo exactamente porque no lo tengo claro?
“Es difícil de decir. Fuimos un dúo durante un año y medio, dos años, antes de ser una banda. En agosto se cumplirán seis años desde que dimos nuestro primer concierto como banda. Así que depende de cómo lo cuentes”.

¿Sientes que las cosas han ido rápido?
“No lo sé. Creo que estamos en una trayectoria ascendente, pero es difícil de decir. Ha habido periodos menos activos, pero ahora igual anunciamos cinco cosas que molan de golpe, así que la sensación es que siempre está sucediendo algo. Hoy por ejemplo se ha confirmado que estaremos en el festival de Glastonbury, algo que ni en mis sueños más locos hubiera imaginado porque no suelen llevar grupos tan cañeros. Estamos felices”.

¿Cómo fuisteis moldeando el sonido del grupo? ¿Qué referentes tenías cuando empezasteis?
“Fue por etapas. Cuando empezamos seguíamos mucho a Norma Jean, The Chariot, Converge y cosas así. Queríamos sonar más o menos como ellos. Pero cuando empezamos a girar como banda empezamos a evolucionar y creo que nos costó un par de discos encontrar nuestro verdadero sonido. Creo que con el nuevo álbum fue cuando realmente nos sentimos totalmente confiados con lo que podíamos hacer. Ahora todo parece más natural. No dudamos tanto a la hora de escribir canciones. Creo que seguiremos madurando e introduciendo nuevos elementos. Me gustaría llegar a ser una banda como Deftones, que tiene partes muy duras, pero es capaz de integrar otras texturas. Creo que siempre vamos a tener partes muy técnicas y cañeras, pero me gustaría ofrecer cada vez más cosas”.

En Eternal Forward Motion no habéis perdido vuestra agresividad, pero las canciones son más directas.
“Sí, como dices siguen siendo cañeras, pero los estribillos son más fáciles de pillar. Y eso mola porque en directo la gente los puede cantar. Antes era todo más loco. Incluso a mí me costaba entenderlo (risas)”.

¿Qué papel crees que un grupo como el vuestro puede tener dentro de la escena metal?
“Creo que la gente tiene la sensación de que las grandes bandas están envejeciendo y hay que empezar a apoyar a bandas que puedan encabezar los festivales del futuro. Quizá es algo inconsciente, pero creo que empieza a crecer el apoyo hacia bandas duras como Code Orange, Venom Prison… Y también hay bandas como Underoath o Norma Jean que han vuelto a la actividad. Es esperanzador para un grupo como el nuestro”.

También hay muchas más chicas en la escena.
“Sí, es algo muy positivo. Cuando yo crecí admiraba a Trent Reznor de Nine Inch Nails o Corey Taylor de Slipknot, pero las chicas de ahora pueden verse reflejadas en otras mujeres haciendo música y eso crea una corriente positiva. Todavía queda mucho para hacer, pero estamos progresando”.

Vuestra música es muy agresiva. ¿Te empuja a decir cosas en las canciones que quizá no dirías en una conversación normal?
“Al 100%. Hay temas de los que me costaría mucho hablar normalmente, incluso que me daría miedo. Para mí el disco es una especie de diario. Un diario personal que se vuelve público. Pero también hay partes más crípticas que cada uno puede interpretar a su manera”.

«Para mí el disco es una especie de diario. Un diario personal que se vuelve público» JUSTINE JONES

¿Dónde sueles escribir?
“Intento aprovechar mi tiempo, así que escribo mucho en el tren. Tengo como una hora entre mi casa y el trabajo en tren y gran parte de las letras de este disco las escribí allí. Y en cuanto a la música, solemos hacer en el estudio casero que tiene Sammy. Trabajamos los riffs y luego se los pasamos al resto y nos mandan sus ideas”.

Escribir en el tren parece una buena idea, porque estás a tu bola, pero también puedes observar a la gente.
“Sí (risas). Me encanta observar a la gente, ves a muchos personajes distintos. Pero puedes aislarte escuchando música y mirar por la ventana e inspirarte”.

¿Disfrutaste grabando el nuevo disco?
“Para mí grabar un disco siempre resulta complicado. Siempre siento que me falta tiempo. Pero esta vez estuve mucho más relajada. Pero no deja de ser estresante porque en mi caso, mi cuerpo es mi instrumento. Siempre tienes miedo de cargarte las cuerdas vocales si tienes que repetir una toma muchas veces. En directo tocamos unos 40 minutos y punto, pero grabando puedes tener que estar cantando durante horas. Si te quedas sin voz, igual tienes que esperar una semana hasta que te recuperas. O ya ni te digo si pillas un catarro, porque tu voz cambia completamente”.

¿Cómo te sientes con las canciones grabadas respecto a como suenan en directo?
“A veces en directo puedes ir cambiando cosas y mejorándolas respecto a como las hiciste en el estudio porque no tenías tiempo. Pero creo que cada una sirve su propósito”.

En directo, ¿os gusta ser la banda más dura del cartel o prefieres tocar con bandas más  cañeras que vosotros?
“La verdad es que me gustan las dos cosas. A veces me gusta que seamos la banda más extrema, pero también disfruto tocando con bandas más cañeras porque hay una gran energía. Me gustó mucho tocar con Funeral For A Friend porque sus dos primeros discos fueron la banda sonora de mi adolescencia, pero también con Norma Jean porque son una de las razones por las que empezamos este grupo”.

¿Planes para venir a España?
“De hecho, lo intentamos. Queríamos tocar con Rolo Tomassi por ahí, tomárnoslo como una especie de vacaciones, pero a última hora no pudimos. Estamos desesperados por ir a tocar para vosotros”.

JORDI MEYA