El retorno de Mr. Bungle no podía ser como el de los demás. Lejos de capitalizar su vuelta para llenarse los bolsillos tocando en festivales, la primera banda de Mike Patton decidió hacer una corta gira por salas y regrabar su primera maqueta. No sólo eso, el grupo ha reclutado a dos de sus maestros, Scott Ian de Anthrax y Dave Lombardo de Slayer, para hacer realidad su sueño adolescente.
Ya sé que en el mundo de la música puede pasar de todo, pero la verdad es que nunca hubiera imaginado que un día entrevistaría a Scott Ian como miembro de Mr. Bungle. Posiblemente no me había pasado por la cabeza porque nunca había escuchado esta The Raging Wrath Of The Easter Bunny Demo, publicada en 1986, hasta que el año pasado anunciaron que iban a regrabarla, así que no asociaba la música de la banda con el thrash metal.
Pero resulta que sí. Que cuando Mike Patton (voz), Trey Spruance (guitarra) y Trevor Dunn (bajo) iban juntos al instituto, les chiflaba la incipiente escena thrash y crossover que tenía sus epicentros en Nueva York y la Bay Area, aunque cuando publicaron su primer álbum en 1991 apenas quedaba rastro de esas influencias, y todavía menos cuando en 1999 lanzaron California, su tercer y último disco hasta ahora.
Es difícil pensar cuáles han sido los motivos que, 21 años más tarde, les han llevado a recuperar sus primeras canciones para publicarlas, aunque como con tantas cosas que ha hecho Mike Patton a lo largo de su carrera simplemente se deba a que le apetecía.
La semana pasada, pudimos conversar con Scott a través de Zoom desde su apartamento de Nueva York, mientras su hijo corría por ahí atrás, y él comía un bol de cereales, para conocer un poco mejor cómo se fraguó este inesperado retorno de Mr. Bungle.
Antes que nada me gustaría preguntarte por Meat Loaf, tu suegro. Siempre he querido preguntarte cómo fue tu primer encuentro con él.
SCOTT IAN «(Risas) Estaba muuuy nervioso porque era fan suyo. Le vi con 14 años en 1978 en la gira de Bat Out Of Hell. Así que tengo que reconocer que cuando Pearl me llevó a casa de sus padres estaba cagado. Sé como funciona la jerarquía del rock, y él está ahí arriba y yo estoy aquí abajo (risas). Pero nunca me hizo sentir mal al respecto y enseguida nos hicimos amigos».
Hablemos de Mr. Bungle. ¿Cuándo los escuchaste por primera vez?
«En 1986 con su primera maqueta. Solía intercambiarme cintas con alguien de California y me mandó su cinta. Supongo que a menos que vivieras en Eureka, California, ésa fue la primera oportunidad de escuchar su música».
¿Recuerdas cuál fue tu primera reacción al escucharla?
«Me gustó lo ruidosos que eran. Me gustaba mucho ese rollo. Cosas ruidosas, brutales y divertidas. Era evidente que no se tomaban muy en serio. Era una cosa muy loca y thrashy. Y con un nombre como Mr. Bungle, y un título como The Raging Wrath Of The Easter Bunny, era obvio que eran unos cachondos. Me encantó que tuvieran sentido del humor y siguió con su siguiente maqueta y los discos que hicieron. Desde el principio, el corazón y el alma de lo que iba a ser Mr. Bungle ya estaba ahí».
Sin embargo, en los siguientes discos esa primera influencia del thrash desapareció casi por completo ¿Les has preguntado el porqué de esa evolución?
«No, no lo he hecho».
¿Cuál de los tres es tu disco favorito?
«No tengo un favorito. Normalmente los escucho mezclados. Tengo una playlist con los tres discos que escucho en modo aleatorio. No escucho los álbumes por separado. Hace tanto tiempo que los tengo, que me resulta más interesante escucharlos así».
«Podría decirse que llevo haciendo los deberes desde 1981 para poder tocar en Mr. Bungle» SCOTT IAN
¿Quién y cuándo te llamaron para proponerte unirte al grupo?
«Fue Mike. Somos amigos de hace mucho tiempo. Estaba hablando sobre algo que no tenía nada que ver con Mr. Bungle, y de golpe, me dijo ‘Llevamos varios días hablando de ti’. Y le pregunté ‘¿Quién?’. Y me dijo ‘Trevor, Trey y yo’. Y le dije ‘¿Por qué?’. Y me dijo ‘¿Recuerdas The Raging Wrath Of The Easter Bunny? Pues queremos que sea el próximo disco de Mr. Bungle, y grabarlo bien, como nunca tuvimos la oportunidad de hacerlo. Pero sólo lo haremos si Dave Lombardo y tú aceptáis hacerlo con nosotros’ (Risas). Tuve dos reacciones inmediatas: ‘¡Pero qué coño dices!’ y ‘¡Sí! (Risas). Pero no estaba seguro de haberlo entendido bien. Eso debió ser como en junio de 2019. Pero fue hace apenas unos meses que descubrí la verdadera historia que había detrás. Resulta que Dead Cross y Secret Chiefs estaban tocando en algún sito, y Mike, Trevor, Trey y Dave estaban en el backstage y Trevor dijo ‘¿Os imagináis si grabáramos The Raging Wrath Of The Easter Bunny con esta formación?’. Y todos se emocionaron con la idea. Tienes que entender que no funcionan como una banda normal. No han estado 20 años pensando en qué iban a hacer con Mr. Bungle. Trey me dijo que así es como lo hacen, esperan a que el relámpago les caiga encima. Es así como hicieron los tres discos. No hacen planes. Y con éste fue igual. Luego pensaron que estaría bien tener a un segundo guitarrista y salió mi nombre porque mis bandas y las de Dave eran las que les habían influenciado entonces».
¿De entrada sólo te dijeron lo de regrabar la maqueta o también te hablaron de tocar en directo?
«Lo primero fue lo de hacer el disco. Querían regrabar todos los temas de la demo y grabar tres que nunca habían terminado: ‘Methematics’, ‘Glutton For Punishment’ y ‘Eracist’. Ésa era la idea inicial. Pero en algún momento comentamos que molaría dar un concierto antes de entrar en el estudio para estar más compactados. No es lo mismo ensayar en el local que tocar en directo. Y entonces lo que tenía que ser un concierto se convirtieron en siete porque las entradas no paraban de venderse. Nos dimos cuenta de qué la gente realmente estaba muy excitada con vernos. Y lo entiendo porque ¡yo también soy fan de Mr. Bungle! Todo lo que hago con ellos lo veo primero como fan. Para mí todo es muy raro (risas). Cuando dijeron que querían hacer un concierto en el Troubadour de Los Angeles, les dije ‘¿Sabéis que sólo caben 500 personas?’. Pero su manager me dijo que no sabían si todavía habría gente interesada en la banda. Y le dije ‘¿Estás loco? Han pasado 20 años. La gente se va a volver loca. Va a venir gente de todo el mundo. Si la banda diera un único concierto en Croacia ¡yo me iría a verlos!’ (Risas). Dimos este siete conciertos y nos llegaron ofertas de tooodo el mundo. Podríamos haber estado dos años de gira sin problemas, pero ése no era el plan. El día después del último concierto volamos de San Francisco a Los Angeles y empezamos a grabar. Fue la manera perfecta de hacerla. Porque ensayamos dos semanas, dimos los siete conciertos, y toda esa energía se volcó en el grabación. Lo grabamos en directo y logramos capturar la fuerza de la banda».
¿Fueron esos siete los últimos conciertos la última vez que tocaste en directo antes de la pandemia?
«Sí, sí. Al menos tengo un buen recuerdo».
¿Habías grabado alguna vez con Dave aunque no fuera de manera oficial?
«No, nunca. Obviamente Anthrax y Slayer hemos tocado juntos muchas veces, pero nunca habíamos grabado juntos. Para mí es un sueño hecho realidad. No conocía apenas a Trevor y Trey, conocía a Mike de hace mucho, y a Dave incluso más, hemos sido amigos desde siempre, pero trabajar con todos ellos ha sido increíble. Amo a Dave, como amigo y como músico. Es una de las razones principales por las que Slayer sonaban a Slayer. Está mi Top 5 de baterías. Poder trabajar con él en un material que es tan adecuado para que sea tocado por Dave Lombardo es una pasada. Mira, Mike Patton es un tipo muy listo. Me dijo que si Dave y yo decíamos que sí, iban a tirar adelante, y que si decíamos que no, lo iban a dejar correr. Para ellos integrarnos en la fórmula era lo que iba a hacer que el material sonase como imaginaban en sus cabezas».
¿Te resultó extraño tocar en un grupo que estaba influenciado por ti?
«Mira, me lo dijeron directamente. Mr. Bungle, entre 1982 y 1985, estaba influenciado por S.O.D., Slayer, Anthrax, Possessed y Mercyful Fate. Pero para mí no fue extraño, me hizo las cosas más fáciles porque el material en sí no es fácil. Los riffs y la velocidad son difíciles de tocar. Los arreglos son complicados porque son muy locos. Pero a la vez estaba familiarizado con todo porque, como te decía, yo era fan suyo también. Y todos escuchábamos la misma música en esos años, veníamos del mismo lugar. Todo tenía sentido para mi mano derecha. Así que eso ayudó».
Supongo que por eso los ensayos para la gira te ayudaron tanto. Llegaste al estudio con los deberes hechos.
«Podría decirse que llevo haciendo los deberes desde 1981 para poder tocar en Mr. Bungle. Les di la clase y ahora he asistido a clase. El profesor se ha vuelto alumno (risas)«.
«Para mí, Metallica siguen siendo una banda underground, por muy grandes que sean» SCOTT IAN
¿Quién escogió las versiones que habéis grabado?
«La canción de Corrosion Of Conformity la escogimos para el directo porque sabíamos que si sólo tocábamos los temas de Mr. Bungle el concierto sólo duraría una hora y nos parecía muy poco. Así que decidimos escoger algunos de temas de hardcore, crossover y thrash metal que escuchábamos en la época. Además Mr. Bungle ya la tocaban en 1985 y 1986. Y además su batería, Reed Mullin, había fallecido hacía poco, así que pensamos que sería un bonito homenaje. Y la de S.O.D. fue idea de Mike. Fue su idea transformarla en ‘Speak Spanish Or Die’ porque todos odiamos a Trump».
¿Confías en que saldrá derrotado?
«No porque pensaba que perdería en 2016. Fue una sorpresa para mí. Ahora entiendo mejor por qué Clinton perdió».
Yo creo que irá mucho más ajustado de lo que dicen las encuestas.
«Yo no me creo las encuestas. Las encuestas dijeron que Hillary Clinton ganaría de calle… Estoy muy preocupado. Yo ya he votado, así que he cumplido con mi parte».
Tú conoces a mucha gente, y seguro que habrá votantes de Trump entre ellos. ¿Has intentado hablar con ellos y entender su punto de vista?
«Lo hice en 2016. Pero todo el mundo que conocía que le votó entonces ha cambiado su opinión. Todo lo dijo que haría no lo hizo. Si la gente le votó porque era un hombre de negocios, pues resulta que es un terrible hombre de negocios. Y además es una persona horrible, es un racista. Es la tormenta perfecta de gilipollismo. Yo no confío en ningún político. Algunos no son tan malos como otros, pero la política está basada en el engaño. Lo que sí creo que es hay seres humanos mejores que otros, y desde luego Joe Biden es mejor persona que Trump. Tiene la piel más dura, no es un crío como Trump que se enfada si alguien le critica».
Volviendo a la música. ¿No crees que la escena crossover de los 80 no ha sido bien tratada por la historia? ¿Crees que quizá el thrash la eclipsó demasiado?
«No lo sé. Desde luego no me siento responsable (risas). Me encantaría que la gente prestara más atención a las buenas bandas, pero el mundo no funciona así. El underground es underground por algo. He tenido esta discusión antes. Para mí, Metallica siguen siendo una banda underground por muy grandes que sean, si los comparas con las estrellas del pop o del country. Por muy grandes que sean, no tienen las mismas oportunidades que las estrellas del pop o el rap. Aunque suene loco, no forman parte del mainstream. Lo sé porque estoy en el negocio y sé cómo se mueven las cosas. No me malinterpretes, nadie está preocupado por la carrera de Metallica, pero ya me entiendes (risas)«.
El año pasado publicaste un disco con The Damned Things y este con Mr. Bungle. ¿Necesitabas airearte de Anthrax?
«No, no. Ahora sigo componiendo para el nuevo disco de Anthrax. Es sólo que si tengo tiempo me gusta hacer algo con mis amigos. Me gusta hacer música con la gente que amo, sea con Motorsister, mi mujer Pearl… porque son gente con la que disfruto pasando mi tiempo fuera de la música también. Muchas veces acabamos tocando, bebiendo y riendo, y algunas veces eso acaban siendo discos».
Pese a eso, una cosa es socializar, y la otra trabajar o convivir. Aunque fueras amigo con Mike y Dave, ¿tenías algún reparo de que igual la cosa no pudiera funcionar?
«No, no fue todo muy fácil. Estábamos muy contentos por estar juntos y hacer música. Fue una experiencia increíble poder pasar tanto tiempo juntos. ¿Cuántas oportunidades tienes de tocar en una banda de la que eres fans y encima con amigos tuyos? Estoy ansioso por poder volver a tocar con ellos. La idea era girar cuando saliera el disco, pero obviamente no podemos. Pero cuando sea posible, en algún momento lo haremos».
Quizá en Croacia (risas).
«¡Sólo en Croacia! (Risas)«.
JORDI MEYA