«Este 2023 no habrá AMFest». Así empieza el comunicado que la organización del AMFest ha compartido para anunciar que, desgraciadamente, este año nos quedamos sin festival.
Según explican pese a haber vivido su mayor edición en 2022, el complicado entorno post pandémico en el que los costes y los cachés de los grupos, así como la competencia entre festivales, y su voluntad de mantener su filosofía independiente y visión artística han hecho imposible conformar un cartel con la calidad a la que siempre aspiran, y que su público siempre ha agradecido.
Desde aquí les deseamos toda la suerte del mundo, y ojalá que en el futuro el AMFest pueda volver con aún más fuerza.
Este es el comunicado íntegro:
«Desde hace años hemos trabajado una propuesta que, como bien sabéis quienes venís cada año, se diferencia en muchas cosas de lo que hoy en día se conoce como festival: precios, formas, cuidado del público, calidad de las propuestas, no solapes, un trabajo real por la igualdad en cada uno de los aspectos que conllevan un festival, y muchas otras cosas en las que creemos y que sabemos han sido muy bien valoradas por nuestro público.
Hemos intentado conformar un cartel para este año pero no nos ha sido posible. En ningún momento del proceso de contratación, que como sabéis empezó mucho antes de acabar el AMFest 2022, tuvimos la opción de optar a un cartel óptimo y que tuviera todo lo necesario para repetir lo que hicimos el año pasado, que a nivel de producción y logística, fue lo más grande que habíamos hecho nunca.
Hay muchas razones, pero la principal es la subida incontrolada de cachés y gastos por parte de agencias de todo el mundo. Es algo de lo que os podrán hablar todos los festivales de formato pequeño / mediano como nosotros a nivel europeo. Se ha ido de las manos y eso ha hecho que no tengamos una propuesta que creamos a la altura del AMFest, que podamos defender, y por eso preferimos no tirar adelante la celebración de este año.
Es importante resaltar que un festival que habla de ética en sus principios no tiene lugar en la selva que se ha convertido hoy en día la contratación de bandas para un concierto o festival. Tirar adelante implicaría jugar a unas reglas que están poniendo grandes empresas, participadas cada vez por menos manos, y que dejan fuera de juego proyectos cuyo fin es cultural y no sólo económico, como es nuestro caso. Festivales, agencias, compañías de booking y bandas que están participando de esta jungla, esperamos que el día de mañana no tengáis que echaros las manos a la cabeza cuándo el monstruo que habéis creado os haya devorado, como ahora están siendo devorados los pequeños y medianos proyectos como el nuestro.
Pero el proyecto AMFest como tal no muere, se queda en estado de hibernación hasta próximo aviso. Creemos que nuestros postulados, ideas y formas de hacer las cosas siguen siendo necesarias en vistas de lo que se ha convertido el mundo de la música en directo.
Por eso, y en un proceso de constante reinvención, trabajamos en un AMfest encubierto, un nuevo proyecto que presentaremos en breve y que busca mantener viva nuestra forma de entender las cosas.
Agradecemos el apoyo y la comprensión de nuestras amigas de La Farga y del Districte Cultural de L’Hospitalet, que han valorado nuestro proyecto como pensábamos merecía y con quienes esperamos trabajar de nuevo en un futuro muy cercano. Y un gracias irónico a aquellas instituciones que nos han denegado ayudas mientras riegan cada año con cantidades insultantes de dinero a festivales patrocinados por cierta marca de cervezas. Ojalá la gestión de la cultura musical catalana estuviera enfocada al apoyo a proyectos pequeños y medianos de interés cultural y no únicamente a lo macro.
Nos vamos! Nos vemos! Os queremos!».