Foals han publicado un nuevo y bailable single titulado ‘Wake Me Up’. Si añoras lo días en que en los clubes sonaban bandas como Franz Ferdinand o The Rapture, es muy posible que esta canción te llene de nostalgia y no puedas evitar mover los pies.
Con este single, el cantante y guitarrista Yannis Philippakis, el batería Jack Bevan y el guitarrista rítmico Jimmy Smith, inician una nueva etapa tras publicar las dos partes del disco Everything Not Saved Will Be Lost en 2019 y reconvertirse en trío.
Hace unos días teníamos la oportunidad de charlar un ratito con Yannis, quien se encontraba en Atenas, sobre qué podemos esperar sobre su nuevo trabajo que llegará posiblemente antes de que los de Oxford se suban a uno de los escenarios del Mad Cool 2022.
¿Cómo compararías el próximo disco con las dos partes de Everything Not Saved Will Be Lost? ‘Wake Me Up’ suena bastante distinta…
YANNIS PHILIPPAKIS «Así es. La intención cuando empezamos el nuevo álbum es completamente distinta a la de Everything Not Saved Will Be Lost. Ese era un proyecto muy grande y ambicioso. Nos dejamos llevar totalmente por cualquier cosa que tenemos en nuestro ADN musical, pero esta vez nos hemos centrado en trabajar en una idea concreta. Yo lo veo como la música de regreso al mundo tras la pandemia. Queríamos escribir música alegre y animada, con mucho groove. Queríamos hacer algo que la gente pudiera disfrutar cuando vuelva a juntarse en las pistas de baile. Las cosas han sido tan deprimente en Reino Unido, así que queríamos hacer algo para animar el espíritu. Es casi música de auto ayuda».
¿Tuviste que hacer un ejercicio de imaginación para poder componer algo así mientras estabas encerrado en casa?
«En cierto modo sí. Los tres íbamos al estudio y teníamos claro que queríamos hacer un disco bailable. Es posible que lo hubiéramos hecho igualmente sin la pandemia, pero en ese contexto todavía tenía más sentido. Era una manera de compensar todo lo que estaba pasando fuera. Estuvimos meses tocando en el estudio, sin ver a nadie, y fue como crearnos nuestra propia burbuja. Y sólo nos salían canciones animadas. Hay algunas que tienen un toque tropical, como si quisiéramos transportarnos a otra realidad que no la que estábamos viviendo en 2020. Una realidad en la que estábamos tomando copas bailando con gente (risas). Queríamos hacer algo positivo».
Musicalmente, sois un grupo que habéis hecho prácticamente de todo. ¿Tener tantas opciones complica las cosas?
«Es una ventaja y una desventaja, supongo, porque implica que tienes que escoger de qué manera quieres expresarte en un momento concreto. En Everything Not Saved Will Be Lost decidimos no tomar esa decisión, así que escribimos temas cañeros de guitarra, baladas, un tema épico y progresivo de 10 minutos, o pequeñas instrumentales. Supongo que el nuevo disco es una reacción a eso. Queríamos algo monocolor, más consistente, con un mismo estado de ánimo de principio a fin. Descartamos otro tipo de canciones, porque queríamos llevarlo todo al ritmo».
Siempre ha sido un elemento muy importante en Foals.
«Sí, porque empezamos tocando en fiestas. Éramos antes que nada una banda para que la gente bailara, aunque tuviéramos guitarras. El nuevo disco es una especie de retorno al pasado».
Habéis publicado seis discos en 11 años. ¿Estás componiendo constantemente?
«La verdad es que sí, pero también me tomo descansos. Y creo que son necesarios. Lo que pasa es que cuando paro, siento una especie de cosquilleo por dentro, y cuando me pongo a escribir de nuevo, me salen muchas cosas de golpe. Soy creativamente incansable, pero no todo lo canalizo en Foals. Me cuesta relajarme (risas)«.
¿Por eso te vas a Grecia?
«Sí. Es como que me lleva al Sur. Hablo griego y tengo familia aquí. No soy la misma persona en Grecia que en Inglaterra. Normalmente cuando estoy aquí solo escucho música griega. Diría que hasta camino de manera distinta».
¿Crees que tienes una doble personalidad, la griega y la británica?
«Sí, totalmente. Creo que también se refleja en la persona que soy en el escenario y la persona que está en su casa».
¿Cómo ha llevado la persona que eres en el escenario tener que estar en casa confinado?
«Pues tuve que encerrarla en una cajita, porque si no me hubiera vuelto loco. Cuando se cancelaron todos los conciertos, tuve claro que tenía que encerrarla. El estilo de vida de la carretera no es sano si no estás de gira. Hubiera sido insufrible».
JORDI MEYA