Que el nu metal murió de empacho es una verdad como un templo. Bandas copiando el baile de Jonathan Davis o los riffs de Wes Borland fueron una plaga. Aún así, no se ha sido del todo justo con el género, aunque aquellos que sobrevivieron a la tempestad han sido precisamente los que han huido de la etiqueta. Deftones, un ejemplo.
Así que cuando uno escucha el nuevo disco de Hacktivist se retrotrae a tiempos pasados. A ese final de siglo XX donde la fusión del rap y el metal era tendencia. Curioso que los británicos hablen del futuro en sus letras cuando son todo un ejercicio de nostalgia. Pero hay que destacar que en su segundo largo han aportado ingredientes novedosos convirtiendo su propuesta en interesante. Y es que uno puede sintonizar ‘Planet Zero’ y observar planteamientos disruptivos. Con un juego de voces atractivo (por momentos Jot semeja un cantante de death), una estética distópica, unas guitarras un poco djent y un aire rave (The Prodigy está ahí), este tema resume bien a las claras quiénes son a día de hoy.
Sin embargo, el álbum pese a conseguir envolverte de una atmósfera oscura a lo Matrix cojea por la falta de un mayor número de buenas canciones. ‘Reprogram’, ‘Armoured Cuore’, ‘Dogs Of War’ o ‘Anti Emcees’ son un notable rotundo, pero el resto no están a la misma altura. Es esa carencia de peones resultones que acompañen con nobleza la partida la que resta valor al conjunto de la obra.
En resumidas cuentas, todos los días escuchamos aquello de que en la música está todo inventado. Y quizá sea cierto, pero lo que está claro es que todavía queda camino que recorrer en el arte de mezclar estilos.
DAVID IPANEMA LEAKS
