Siguiendo la estela de esa carta de presentación, el cuarteto de Guernika lanza ahora una continuación algo más extensa y variada con las grietas (‘arrakalas’, en euskera) como elemento cohesionador. Son brechas metafóricas, mentales y políticas. En ‘Ekialderaino’, por ejemplo, lamentan el distanciamiento o pasividad occidental ante la masacre televisada en Oriente Próximo y en ‘Piztia fina’ describen esa peligrosa bestia irracional llamada odio que enfrenta y separa.
Inner siempre han ido de cara, exhibiendo con entusiasmo sus influencias, ya perfectamente integradas en su propuesta. El primer guiño lo encontramos en la portada, una fotografía en blanco y negro de Hibai Agorria, autor también de la carátula del primer EP. Y es que la composición de la misma e incluso la tipografía remiten a otro largo debut como It’s Hard To Find A Friend (1998) de Pedro the Lion, cuyo influjo es notorio en las intensas ‘Betirarte’ (dedicada a un amigo fallecido hace dos años) y Arrakala’.
El cuarteto tampoco puede negar su pasión por los Weezer más llorones (el adictivo riff de ‘Zoru Poetikoa’), las letras poético-combativas de Gorka Urbizu (el buen hacer de Berri Txarrak ha marcado a varias generaciones) y, en general, bandas emo de cabecera como Sunny Day Real Estate (mi favorita ‘Eldarnioa’). Por todo esto, solo me queda recomendar Arrakala, un disco honesto con momentos conmovedores grabado en directo con el veterano José Lastra (Zea Mays, Empty Files) y mezclado y masterizado por la propia banda en el mítico centro autogestionado Iparraguirre Rock Elkartean.
LUIS BENAVIDES