Hoy hace 30 años y un día The Cure editaba uno de sus discos más celebrados. Hablamos, claro, de Desintegration. A pesar de su gran éxito comercial, el título del álbum casi fue profético y al final de su larga gira mundial, Robert Smith estaba tan quemado que incluso se planteó la disolución del grupo.

Afortunadamente, las aguas volvieron a su cauce, pero incluso si éste hubiera sido su último disco, el legado de The Cure estaba asegurado. Como muestra esta ‘Lovesong’ que Smith escribió como regalo de bodas para su mujer Mary Poole y que aquí os presentamos en esta versión que grabaron Death Cab For Cutie en 2009.