De vez en cuando, muy de vez en cuando, alguna banda interesante aparece tocando en la televisión pública de este país. Era una noche cualquiera cuando, zapeando, me detuve en el canal de Betevé (Barcelona Televisión): hacían el programa de música Feeel y un trío formado por dos chicas y un chico estaban haciendo bastante ruido. Respondían al nombre de Mendra y en aquel momento pensé: son carne de BCore.
Meses después nos llega un vinilo de parte de la mítica discográfica catalana y voilà! es Hostal Hostil de Mendra. Se trata del segundo LP de este grupo de Girona (antes también sacaron un EP compartido con Manual de Combate) y viendo la contraportada del 12” caigo en la cuenta que el chico en cuestión es Víctor Álvarez, Pelusa, quien también aporrea la batería en los energéticos Tano. Aquí este power trío presenta diez canciones que grabaron en febrero de 2020, justo antes de lo que todos sabéis, y que llevaban tocando en directo casi dos años.
El álbum por fin ha visto la luz este año gracias a la combinación de fuerzas de varios sellos estatales y el resultado es un post hardcore con toques punk, de calidad, honesto y con una gran carga de libertad ya que se nota en seguida que Paula, Sofi y Víctor se encuentran muy cómodos tocando juntos.
Todos los cortes son de notable alto (aunque mis preferencias me hacen destacar ‘Diana Fidelman’ y ‘Elefant’ sobre los demás) y, lo más importante, empacan bien como un todo, sin altibajos. Del sonido facturado por el trío me quedo con el peso importante de la sección rítmica; lejos quedan ya aquellos tiempos en que las voces y las guitarras se comían prácticamente todo el sonido de cualquier grupo de rock.
Las influencias de Mendra van desde Nueva Vulcano hasta Two Dead Cats, pasando por cualquier combo que se identifique con el emo punk más básico y visceral. En el apartado lírico encontramos unas letras existencialistas de enfoque introspectivo, alternando el uso del catalán y del castellano como medios de comunicación de cara al oyente/lector.
Las componentes del trío utilizan un término bastante curioso para autodefinir su música: punk con curvas. Vale, tengo que reconocer que mola y que se ajusta bastante a la propuesta sonora de Mendra, así que ahí queda.
JORDIAN FO
