Hay algo admirable en la fe y jovialidad con las que Nada Surf siguen publicando discos cuando su carrera ya ha entrado en la etapa de madurez. 

A pesar de seguir, en términos de popularidad, exactamente en el mismo punto en el que estaban que cuando publicaron su segundo o tercer disco, su moral parece seguir intacta. No solo eso, también su capacidad para seguir escribiendo buenas canciones. Moon Mirror nos devuelve, tras cuatro años de silencio, a una banda sintiéndose totalmente a gusto en su piel, sin ganas de epatar, ni ansiedad por reinventarse.

Arrancan el álbum con dos temas impetuosos de power pop que bien podrían abrir también los conciertos de su próxima gira, ‘Second Skin’ y ‘In Front Of Me Now’,  en las que las relucientes melodías de Matthew Caws se deslizan por encima de la base rítmica impulsada por Daniel Lorca y Ira Elliot y los adornos del teclista Louie Lino. Nada Surf en su máxima expresión.

Subiendo un poco la distorsión en ‘Intel And Dreams’, ‘Open Seas’ y ‘X Is You’, esta con un piano trotón, recuperan la energía de su debut como si los casi 30 años que han transcurrido desde entonces hubieran sido un sueño, mientras que con bonitas y reflexivas baladas como ‘Moon Mirror’, muy al estilo de Matthew Sweet, ‘The One You Want’, ‘New Propeller’, donde se acercan a Death Cab For Cutie, o ‘Floater’ dan fe que la experiencia también les ha convertido en maestros a la hora de trabajar en registros más sutiles.

Quien los haya seguido hasta aquí se sentirá reconfortado al comprobar que mantienen el nivel y la elegancia en un disco que fluye de lo más bien.

JORDI MEYA