La historia de Vrademargk es idéntica a la de miles de bandas en todo el mundo. Empezar con muchas ganas, tirar adelante un proyecto, cambios de formación, decepciones, muchas horas para compaginar trabajos y pasión, con suerte grabar algún disco, conciertos y giras con pocos medios para, finalmente, no llegar a ninguna parte.
Muchos grupos acaban arrojando la toalla (y más en estos días de pandemia y virus). Y esto es lo que parecía que les acabaría sucediendo a los catalanes, ya que su último trabajo se remontaba al 2013, y pocas y malas noticias nos llegaron en este tiempo para tener algo de esperanza con ellos. Pero si algo tienen los egarenses es perseverancia. Después de estos ocho años casi todos hubiésemos desistido, pero Jordi Urbano (voz) y Rafa Ruiz (guitarra), los únicos miembros originales en activo, parece que son de aquéllos que no se rinden fácilmente.
Y en pleno 2020, se embarcan en el que será el cuarto disco, Arrelats. Para ello se ponen en manos del gran Eloi Boucherie (alma máter de los míticos Vidres A La Sang) en los Farm of Sounds para grabarlo, y en las de Jaime Gómez Arellano y su Orgone Studios para la masterización. Casi nada. Y el resultado, aunque suene a topicazo, es que los de Terrassa han parido su mejor trabajo hasta la fecha.
Arrelats, como bien indica su nombre, es un disco creado desde la raíz, desde lo más interno y profundo de sus almas. Y qué mejor que cantar en tu lengua materna para transmitir eso. Jordi decidió usar su idioma para poder expresarse mejor y de este modo conseguir que sus letras tuviesen más profundidad. Y el resultado es innegable.
Tras una breve introducción llamada ‘Lividesa’, el cuarteto arremete sin piedad con el tema homónimo que da nombre al disco y que es toda una declaración de principios. ‘Estigmes Sobre Cendres’ y ‘L’Alè Dels Indòmits’ te continúan golpeando abajo, con ganas y toda la fuerza que puedas imaginar para dejarte reposar (es un decir) con un corte más introspectivo, pero igual de poderoso, como sería el caso de ‘L’Art De Morir’. ‘Egocidi’, una canción primorosa, te lleva hasta el último corte, ‘Eudaimonia’, donde Eloi se marca una colabo fantástica para cerrar el álbum.
Vrademargk están de vuelta. Y si esto es ya de por sí una muy buena noticia, encima lo han hecho con la mejor colección de canciones que hayan grabado nunca. Si jamás dejaron de creer en ellos mismos a pesar de las complicaciones y las piedras en el camino, ¿por qué cojones deberíamos hacerlo ahora nosotros?
KARLES SASTRE
