Disco tras disco, este gusano se ha ido retorciendo y agigantando por el lodazal extremo de tal manera que se ha ganado más almas para su causa. Para ester tercer álbum, Equimanthorn y Fantomslaughter han reclutado a las guitarras a un nuevo integrante, Nihilistic Manifesto (y a L. Dusk como baterista de sesión) para, así, poder desenvolverse mejor con los teclados de Worm.
Una certera decisión, ya que es apabullante el protagonismo que destilan estos últimos en Foreverglade y la dupla que sostienen en todo momento con el solista, consiguiendo así un álbum de un dinamismo y atmósfera con mucho carácter y personalidad, como si de una experiencia terroríficamente cinemática de las películas de la Hammer se tratara.
Tras unos misteriosos teclados y susurros, la homónima e introductoria ‘Foreverglade’ despliega ya todo el potencial del que son capaces los de Florida. Poderosísima base rítmica acentuada con los profundos growls que se van combinando con tortuosos shrieks, dobles guitarras, una con riffs y distorsiones propias del death doom más vetusto y, otra, melódica, que va jugando con escalas y solos al unísono de tétricos teclados.
‘Murk Above The Dark Moor’ es una majestuosa prueba de la devoción que manifiestan hacia el death doom primigenio, como ya nos demostraron en sus anterior Gloomlord, y especialmente inspirados por la banda de culto diSEMBOWELMENT. Una marcha mortuoria emprende el camino hacia cavernosas y lóbregas regiones de tu yo más oscuro, hasta un devenir de solos de guitarra que ejercen de puente con ‘Cloacked In Nightwinds’. La agonía y maldad que desprenden las voces rasgadas y agudas se hacen más patentes en este tercer corte. Coros sacerdotales y crepusculares teclados se adueñan por momentos de la asfixiante atmósfera aquí perpetrada.
A priori podríamos decir que el death doom manda en Foreverglade, pero sería quedarse corto, ya que la cantidad de matices y detalles en la composición que por aquí fluyen, dan cabida a otros estilos metálicos. Prueba de ello es ‘Empire Of The Necomancers’, pues sus épicos y emotivos solos heavylones y posterior aceleramiento hacia un death metal melódico, e incluso algo progresivo, serán lo que brille y destaque sobre el resto de canciones.
‘Subaqueous Funeral’ sorprende al descubrir que lo acontecido en la anterior ‘Empire Of The Necomancers’ no ha sido casualidad y aquí el derroche de técnica y emotividad se eleva efímeramente para caer en ‘Centuries Of Ooze’, otro mazazo de putrefacto death doom que, a estas alturas, ya podríamos tildar de sinfónico, puesto que los teclados se adueñan otra vez de este pantagruélico y definitivo tema.
Tras un interludio que recuerda muchísimo a ‘The Graveyard By Moonlight’ de Cradle Of Filth, nos ofrecen generosamente una sucesión de desoladores pasajes combinando variaciones en los tiempos más rápidas que anteriormente, destacando la base rítmica con buenos momentos de doble bombo y algún que otro blast beat para finalmente ponernos en nuestro sitio sutilmente con armoniosos solos.
Si eres un nostálgico de Unholy, Ceremonium, Dusk, Thergothon o diSEMBOWELMENT, tus carencias serán recompensadas con Foreverglade.
SANTA