Elige vida. Elige perder tu tiempo en Instagram, Twitter o Facebook y espera que alguien le interese. Elige drogas legales mitigando insomnio. Elige gimnasios de veinticuatro horas llenos de vídeos sexistas.
Elige vivir en una puta burbuja de auto conmiseración. Y podríamos seguir así toda la reseña, haciendo un homenaje al memorable monólogo de Renton en Trainspotting 2. como dice en la película, si eres un adicto, sigue siendo un adicto, pero no un adicto al turismo de tu juventud ni de la basura que te crees o te metes para sentirte mejor. Cambia tu adicción a lo que te haga sentir vivo de verdad. Coge el puto tocadiscos, el CD, lo que sea… y ponte Alphabetland, el nuevo álbum de X. ¿Un grupo de punk rock angelino que llevaba sin sacar un disco nuevo hace más de tres décadas? ¿Nostalgia y contradicción por lo antes escrito? No. Reafirmación que como los tiburones, si te quedas quieto te mueres, y debes mudar de piel como hizo Bowie en su vida si quieres que esta tenga algún puto interés.
Uno de los mejores grupos alternativos de la historia, sacan un disco fresco, que aún manteniendo sus esencias, suena a 2020, al año de la jodida pandemia del coronavirus. Directo al corazón, sin subterfugios. Exene Cervenka y John Doe intercambiando sus voces en canciones que son pura artesanía en su lado melódico. Once canciones insufladas de personalidad para encarar tu presente sin miedo. Con un invitado como Robbie Krieger dada su antigua conexión The Doors vía Ray Manzarek en ‘All The Time In The World’, una pieza de toque jazz y spoken word mejor que la metanfetamina de Heisenberg.
Desde la primera canción, pasando por ‘Delta 88 Nightmare’ o ‘Cyrano deBerger’s Back’, asistimos a un disco que salió en plena pandemia en Bandcamp -ahora se edita por fin en formato físico- que nos dice: estamos vivos, estamos en el presente en forma, y eso es lo que importa.
IGNACIO REYO
