Cualquier melómano que se precie sabe bien que en las llamadas hidden tracks uno puede encontrar grandes tesoros en forma de canción. Los alemanes Beatsteaks se guardaron un as bajo la manga para su tercer álbum publicado en 2002, Living Targets.
Al poco de finalizar ‘Summer’, el corte que, en principio, cerraba el disco, arrancaba ‘Yeah!’. Otro temazo que no hacía sino redondear uno de esos trabajos perfectos para alegrar el día más gris.