A principios de la pasada década, dio la sensación que a Chino Moreno le motivaban más los proyectos paralelos que su propia carrera al frente de Deftones. En apenas tres años tuvimos dos EP’s y un álbum de ††† (Crosses), su banda con Shaun Lopez de Far y el bajista Chuck Doom, y también el debut de Palms, su grupo junto a tres miembros de los post-metaleros Isis.
Sin embargo, a pesar de que desde entonces ha seguido haciendo colaboraciones puntuales con Mike Shinoda, los chilenos Cómo Asesinar A Felipes, o más recientemente con Polyphia, aquellos proyectos -por no hablar de Team Sleep- parecían haber quedado en el olvido.
Algo pareció moverse cuando en diciembre de 2020 ††† (Crosses) publicaron una versión de ‘The Beginning Of The End’ de la banda de electropop Cause & Effect, pero realmente no fue hasta el pasado marzo que pudimos disfrutar de nuevas composiciones propias por su parte cuando lanzaron los singles ‘Initation’ y ‘Protection’. Y aún así, hemos tenido que esperar nueve meses más para que su vuelta se haya hecho realidad con este EP que incluye otros seis temas más.
En el camino se ha bajado del tren Chuck Doom, quedando Moreno y Lopez como únicos componentes, pero la personalidad de ††† (Crosses) no se ha visto demasiado alterada. En todo caso se aprecia una mayor voluntad por aportar luz a su característica oscuridad, y una mayor atención a las composiciones y no tan solo a la creación de atmósferas. A su manera, la pareja ha buscado dar una mayor calidez en el uso de las bases electrónicas y los sintetizadores, como queda claro desde la inicial ‘Sensation’ que te envuelve lentamente con una melodía ensoñadora y ese irresistible toque sexy que impregna la manera de cantar de Moreno.
Aún más atractivas resultan ‘Vivien’ con una con una parte en el estribillo que de manera sorprendente recuerda al hook de ‘Baby One More Time’ de Britney Spears o ‘Day One’, que con una percusión electrónica casi tropical destaca del resto por su ligereza. No falta un acercamiento a sus adorados Depeche Mode en el medio tiempo ‘Holier’, mientras que la final ‘Procession’ encajaría de maravilla en la banda sonora de alguna película de ciencia ficción por su capacidad de evocar espacios infinitos.
Teniendo en cuenta que han pasado ocho años desde su debut, quizá esperaba una evolución mayor o algún giro inesperado, pero tanto por el nivel de las canciones como por su exquisito acabado, la existencia de este EP está sobradamente justificada.
DAVID GARCELL